¿Cómo es hoy viajar en colectivo de larga distancia para un pasajero con discapacidad?

Gastón es un músico y docente comodorense que debido a una enfermedad quedó con movilidad reducida y se debe trasladar en silla de ruedas, hace 6 años utiliza el transporte de larga distancia cuyo beneficio es tener un pasaje gratuito. Desde este año vio como todo se volvía un problema cuando redujeron la cantidad de pasajeros de 6 a 2 por unidad y realiza un reclamo.

Gastón es un joven de 24 años que fue diagnosticado con el Síndrome de Hopkins, primer caso de estudio en la Argentina y por este problema quedó con la movilidad reducida y debe trasladarse en una silla de ruedas.

La silla de ruedas no le impidió a este joven estudiar y dedicarse a lo que más ama, que es la música, además de ser docente de música (flauta traversa) en Buenos Aires, forma parte del grupo de cumbia comodorense Los Cheremeques y trabaja junto a la cantautora de música infantil Mariana Cincunegui.

Hace seis años que Gastón viaja de Buenos Aires a Comodoro Rivadavia, ciudad donde nació y pasa las fiestas, con su certificado de discapacidad que por derecho, bajo la ley 25.635, puede realizar de manera gratuita junto a un acompañante.

A pesar de que esta ley indica que el pasaje puede sacarlo hasta con 48 horas de anticipación "yo siempre voy un mes antes, mes y medio para evitarme problemas. Hasta hace 6 meses nunca tuve un drama con esto, sacaba el pasaje, me daban el asiento junto a mi acompañante y viajábamos", relata a El Patagónico.

Todo comenzó a complicarse el pasado noviembre cuando, con un mes y medio de anticipación decidió ir a solicitar su pasaje a la Comisión Nacional de Regulación de Transporte que desde el año pasado es la intermediaria entre las líneas de transporte y los usuarios. "Era un caos, había mucha gente en mi condición, gente grande haciendo largas colas, y desde la CNRT nos dijeron que bajo la ordenanza 118/2006 inciso 4b se reducía la cantidad de personas con discapacidad de 6 a 2 por unidad y que dentro de esa cantidad de personas el acompañante contaba como uno, o sea que si yo voy con mi acompañante ya cubrimos el cupo de una unidad".

Luego de una larga espera y discusiones, Gastón logró que le dieran vía libre para empezar a tramitar su pasaje con la empresa, por lo que tenía que ir a pedir el boleto para la fecha que el necesitaba. "Fui a la empresa y me dijeron que vaya el día 15 de noviembre y cuando fui, me informaron que estaba todo cubierto y podía viajar recién el 23, que no era la fecha que tenía que viajar".

Como resultado de todo este orden burocrático, el joven músico decidió sacar un pasaje de avión. "Gracias al cielo yo puedo costearme un pasaje, pero ese no es el punto, es un derecho que tenemos y ahora nos ponen más trabas. Había mucha gente esperando en el lugar, muchas personas que tienen su derecho y que fue vulnerado, había gente grande que no entiende lo engorroso de estos trámites. Yo me banco viajar 27 horas en colectivo e ir arrastrándome por el pasillo y entrar a un piso sucio del baño del colectivo, porque es lo que hay, encima de tener que vivir eso ahora nos ponen a competir con otras personas en la misma condición para ver quién puede tener un lugar en un transporte público", detalló indignado.

"Lo que pido es que respeten lo mínimo de una ley, porque la ordenanza 118/2006 inciso 4b fue declarada inconstitucional por la Corte Suprema y la están utilizando para quitarnos derechos adquiridos, ya no pienso por mí, pienso por otra gente o futuras generaciones que tal vez no se tengan que estar arrastrando por el piso de un colectivo o hacer filas infinitas para que te nieguen un pasaje".

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