Carla Chiarandini: preparadora física y personal trainer
Es muy importante continuar con el ejercicio en verano pero es esencial tomar algunas precauciones durante esta época. El promedio que tarda una persona en condiciones normales para adaptarse a temperaturas más calientes y húmedas son de una a dos semanas.
Lo primero que tenemos que saber es que debemos estar diariamente hidratados ya que cuando realizamos ejercicio y hace mucho calor, se puede perder fácilmente hasta un cuarto de litro de agua en una hora. Es importante beber agua antes, durante y después de hacer ejercicio.
Si estuvimos realizando actividad, continuar bebiendo agua incluso aún si ya no tengo sed o alguna bebida deportiva.
También es importante no hacer deporte durante las horas de máxima temperatura para evitar los llamados "golpes de calor", usar ropa clara en lo posible y protector solar. Por las mañanas sería una buena opción ya que las temperaturas son más bajas o por la noche y sino realizar ejercicio en algún gimnasio, en casa, etc.
Y siempre recordá que la salud no se toma vacaciones. ¡A disfrutar y a cuidarse!