Al cierre de esta edición, el menor de edad A.K.O. continuaba alojado en un calabozo de la Seccional Tercera a pesar de que la Justicia en horas del mediodía había dispuesto su entrega a sus padres. Sin embargo, la madre del chico había avisado que recién a las 22 de ayer podía retirarlo. Además, el joven hoy deberá comparecer en la Oficina Judicial.
Habitantes del barrio Pueyrredón que residen a pocas cuadras de las 1008 Viviendas mantienen su preocupación por la ola de robos domiciliarios, incluso con moradores en su interior, que se registraron en los últimos días.
Los vecinos ya habían sido alertados sobre la identidad del adolescente que andaba robando en esa zona y ayer fue atrapado por albañiles que trabajaban en una casa de la calle Basilio Miljukow al 600, entre La Razón y Gaceta de Buenos Aires.
Según informaron autoridades policiales de la Seccional Tercera a El Patagónico, eran las 10:30 cuando la propietaria de una casa se encontraba sola y fue sorprendida por un solitario delincuente que simuló tener un arma en su poder. Intimidó a la víctima en forma verbal, lo que hizo reaccionar a la mujer. Esta tenía un vaso de agua en una de sus manos y se lo arrojó por la cabeza al delincuente quien alcanzó a llevarse un teléfono celular Samsung. Luego los gritos alertaron a los albañiles que trabajaban en la casa lindante y no dudaron en ir a ver qué sucedía.
Los hombres se encontraron con el ladrón y lo redujeron arrojándolo al piso. Los vecinos llamaron a la policía, y de esa forma el adolescente fue conducido a un calabozo de la Seccional Tercera en averiguación del delito de robo en grado de tentativa.
La madre del menor de edad que reside en las 1008 Viviendas fue notificada de la situación de su hijo por parte de las autoridades judiciales, y afirmó que podía retirarlo de la comisaría recién a las 22. Anoche seguía en una celda a la espera de ser retirado.
- 23 agosto 2017