En ese sentido, señaló que "es un caso de denuncia política armada, donde no hay ninguna acusación y los testigos pertenecen a Cambiemos, frente que no está de acuerdo con nuestra política económica".
Siguiendo la misma línea, en diálogo con la prensa que se encontraba en las adyacencias de los tribunales federales, el ex funcionario aseveró que en todo el expediente "no se observa ningún delito, de nadie, ni del Banco Central ni del Poder Ejecutivo, y no hay ninguna acusación de corrupción". Y sentenció: "La acusación es absurda".
Bonadio acusó a Cristina Kirchner y a Kicillof de haber dado la orden política para la maniobra que según la acusación del juez generó un perjuicio multimillonario al Estado nacional. Por eso, les imputa haber provocado un estado de "quebranto" del Banco Central por unos 7.500 millones de pesos comprometidos a pagar por dólares a futuro a un precio al que los compradores lo podían conseguir en otros mercados (14 o 15 pesos) y no a los $ 10,75 en el que se encontraba a fin de año la divisa estadounidense.
Hasta ahora, todos los imputados, incluido el ex presidente del Banco Central Alejandro Vanoli, se negaron a declarar y presentaron escritos a modo de defensa.
Para mañana, se prepara un operativo especial de seguridad en los tribunales federales del barrio porteño de Retiro, ya que diversas organzaciones kirchneristas prometen una multitudinaria concentración para apoyar a Cristina.