Lucía Uremovich sumó su segunda participación con la "Albiceleste"

Con dos participaciones internacionales, la mujer que se inició en la actividad cuando cursaba sus estudios secundarios, apuesta a seguir vigente. "Cuando tenía 18 años había de 6 a 8 equipos, debemos recuperar a esas chicas que le imprimían pasión al deporte", sostuvo.
por Angel Romero

Lucía Uremovich conoció el básquetbol durante su secundaria en el Colegio Domingo Savio, cuando este contaba con el club donde se desarrollaban multiplicidad de disciplinas deportivas.
Con 1,73 metros de altura, Lucía se fue ganando su lugar en el poste alto. Pero con el correr de los años (y la disolución del club), la actual integrante de la Selección Nacional de Maxi Basquet tuvo un impasse de las canchas.
Como lo suyo no era la resignación, hace poco más de cinco años se sumó a los entrenamientos en el municipal 2, donde tres veces por semana se reencontró con mujeres como ella para las cuales el paso de los años no fue excusa para bajar los brazos.
De esta manera llegaron las participaciones en los torneos Argentinos que se realizan en forma mensual en distintos puntos del país. Y fue en ese espacio de encuentro y competencia que se le abrió la puerta para integrar la Selección Argentina de Maxi Básquet. Equipo con el cual ya tuvo rodaje en el Mundial de Orlando 2015. Y en el Panamericano que se desarrolló la última semana de abril de este año en Costa Rica.
"Participé con la Selección Nacional en la categoría de más de 45 años (se dividen cada cinco años los equipos) y fue una experiencia excepcional como lo fue el Mundial de Orlando 2015. Ya sea en la competencia misma como en el rodaje, porque en lo personal el practicar un deporte a conciencia hace que te sientas vital. Creo que esa es una de las mayores satisfacciones. De hecho, cuando tenía 18 años había de 6 a 8 equipos, debemos recuperar a esas mujeres que le imprimían pasión al deporte", recalcó Lucía a El Patagónico.
La competencia, el punto de encuentro con otras mujeres como ella, y los torneos Argentinos es la motivación constante que Lucía encuentra para ir por más en cada entrenamiento para superarse a sí misma.
"Esta actividad que es amateur, mantiene el espíritu de grupo y la superación personal intacta. Y cualquier mujer que entrene a conciencia puede tener la posibilidad de trascender. De cuidar su salud, y mantener viva una pasión que en mi caso sigue intacta desde que comencé a los 14 años", concluyó.
El básquetbol mayor femenino tiene su punto de encuentro en el gimnasio municipal 2 de barrio Pueyrredón los lunes, miércoles y viernes de 21 a 22 a cargo de la profesora Verónica Hernández como entrenadora.

Fuente:

Notas Relacionadas

Dejá tu comentario

Las Más Leídas del Patagónico