El titular del Registro Civil de Santa Fe, Gonzalo Carrillo, consideró que el nombre resultaba "demasiado peyorativo para el menor" y decidió rechazarlo.
En este sentido, el funcionario explicó: "En cuanto a los nombres de las personas, el tema queda a criterio del oficial público quien debe evaluar la situación. Si considera que es discriminatorio para el chico, realiza una consulta a la dirección del Registro Civil. En este caso puntual, me consultaron y dije que no".
Lo cierto es que el 1º de agosto entró en vigencia el nuevo Código Civil y Comercial y ahora le ley otorga mayor libertad a las personas para definir el nombre de sus hijos. Se reconoce la posibilidad de inscribir nombres aborígenes o derivados de voces aborígenes autóctonas.