Reveco está en Japón para "recuperar lo que se perdió" en abril

El boxeador argentino, ex campeón mundial mosca de la AMB, intentará recuperar el título que le arrebató el púgil japonés en abril de este año, por puntos y en fallo no unánime.
El ex campeón mundial mosca de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), el mendocino Juan Carlos "Cotón" Reveco, aseguró ayer que "el único objetivo de estar en Japón es recuperar lo que se perdió" en abril pasado ante su rival de mañana, el local Kasuto Ioka, quien en polémico fallo le arrebató el título por puntos en fallo no unánime.
El boxeador oriundo de Malargüe, de 32 años, con un palmarés de 35 victorias (19KO) y 2 derrotas, en caso de ganarle a Ioka (17; 10 KO; 1) se convertirá en el primer argentino en lograr cuatro títulos mundiales.
El combate de mañana será a las 20 de Japón (8 de la Argentina) en la pujante ciudad japonesa de Osaka y será televisado a través de la señal de cable TyC Sports.
En declaraciones formuladas a Canal 9 de Mendoza, Reveco explicó ayer que "ha sido un día tranquilo, tuvimos el chequeo médico de la pelea, en el cual nos vimos las caras con Ioka, pero todo en un clima distendido".
"Después vinimos a descansar y luego fuimos al gimnasio en el cual nos movimos y trotamos un poquito, como para quitarnos de encima los últimos gramos que traía encima, y ahora a aguantar hasta mañana que es el pesaje", agregó 'Cotón' Reveco.
Ante una consulta, manifestó que "se vive raro, una fiesta de Navidad y de fin de año diferente, distintas a las que estamos acostumbramos a tener. Lejos de la familia, pero esta circunstancia a veces, tanto a mí como a mi equipo, nos fortalece".
"El único objetivo acá, es venir a buscar y recuperar lo que se perdió en abril. Tenemos la cabeza muy puesta en eso -agregó- y en que todo salga bien, para que pueda consagrarme nuevamente campeón del mundo".
Más adelante, Reveco señaló que "tengo dos hijos, cuando uno ya es padre no sólo piensa en uno, si no en la familia, sobre todo en los hijos, de lo que le voy a dejar a ellos en el futuro, y que ojalá sea bueno".
Finalmente el púgil mendocino reconoció que "por esas cosas de la vida, no tuve una buena infancia, por eso quiero dársela a mis hijos como se la merecen, quiero asegurarles su futuro", concluyó.

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