Un accidente derivó en destrozos, insultos y una mujer hospitalizada

La conductora de un automóvil chocó la parte trasera de un remís en Mitre y Ameghino. El accidente derivó en una discusión. El remisero, según él mismo admitió después, la insultó y le destrozó la luneta porque la mujer quiso embestirlo e irse del lugar. Tras ese incidente, la conductora se bajó de su auto y se colgó de la puerta del remis reclamándole que le pagara el vidrio. Sin embargo, el chofer continuó circulando y la mujer cayó pesadamente al asfalto. Tras la intervención de la policía el hombre quedó detenido por daños y lesiones. Recuperó la libertad durante la tarde.
Después que hace dos semanas un conductor le asestó una puñalada a otro en una discusión generada por un incidente de tránsito en la calle 9 de Julio, entre Sarmiento y San Martín, los ánimos de algunos automovilistas que circulan por el centro de Comodoro Rivadavia siguen alterados. A las 14 de ayer, un choque en Mitre y Ameghino derivó en insultos, la rotura de una luneta, la hospitalización de una mujer y la detención de un hombre.
Todo era desconcierto en el lugar cuando llegó la policía. Es que Sandra Rojas, la conductora de uno de los automóviles involucrados, gritaba de dolor recostada sobre el asfalto.
Una gran cantidad de curiosos observaba desde la vereda. El Renault Mégane de la mujer permanecía estacionado en plena ochava con la luneta destrozada. Su hijo menor de edad y las dos compañeras de estudio de la mujer, que viajaban junto a ella, se mostraban angustiadas por su salud.
Personal policial de la Seccional Primera preguntaba a un testigo ocasional sobre lo ocurrido. Las sirenas de la ambulancia se mezclaban con el llanto de Sandra quien permaneció recostada en la calle hasta que los socorristas la inmovilizaron.
"Agarralo a ese hijo de puta, sacale el carnet que no siga matando gente", le gritaba desde el suelo la lesionada a un suboficial que le tomaba los datos.
"Pero, ¿por qué está rota la luneta?" preguntó el paramédico. "Me la rompió el remisero hijo de re mil. Me arrastró con el auto. Me quiso matar el hijo de puta, si caía debajo del auto me mataba", respondía ella ya con el cuello cervical puesto.
"Mi pierna, no me toquen por favor. Ahh, ahh", gritaba la mujer.
En la vereda una señora mayor se llevaba la mano a la boca y miraba azorada.
"La señora quería parar el auto y cayó. No sé qué sonó, si la cabeza o qué", relataba un testigo ocasional. "No sé qué habrá pasado, cuando nosotros llegamos dijo que le había cortado la cara al nene, no sé qué habrá pasado en el medio", sostuvo el testigo a El Patagónico.
Todo apuntaba a que había tenido problemas con un remisero. El Chevrolet Corsa del que Rojas se había colgado estaba detenido a unos 50 metros del lugar, por la calle Mitre.

LA VERSION
DEL REMISERO
Hugo Herrera, chofer de la agencia de remises "Comodoro", dio su versión a El Patagónico. "En la Mitre iba a doblar, y a mí se me escapó la mano y le pegué en la luneta (destrozándola). Ella se agarraba de acá (señala el parante) pero yo en un ningún momento la choqué. Se tiraba del auto, yo no la toco en ningún lado y al piso se tiró. Ni siquiera la toqué", insistía Herrera. Lo que el remisero trataba de explicar era que no la había atropellado.
Todo se había iniciado cuando el Renault Mégane conducido por la mujer impactó la parte trasera del remis y se generó una discusión. "Me choca de atrás. Le digo 'pero escuchame ¿qué te pasa? ¿Por qué me chocás?'. A mí se me escapó 'pero boluda qué hacés', le dije. Porque decía que yo tenía la culpa", admitió el remisero frente al insulto que siguió al choque.
"Y le digo 'vení vamos a arreglar'. Y me dice, '¿pero quién sos vos para arreglar, yo no te voy a pagar?'. Y yo me puse en la calle, y ella me iba a chocar. Y entonces le digo, 'vení chocame si estoy parado'. Y ella me metió el auto, y yo me tiré para al otro lado", relató muy nervioso Herrera.
En medio de su explicación, el remisero se quebró y lloró. El hombre dijo que bajó y le dijo a Rojas que se quedara. Señaló que la mujer se iba del lugar y que ahí él le rompió la luneta.
Al ver la luneta destrozada, la mujer se bajó de su auto y se tomó del parante de la puerta del remis diciéndole al chofer que no se fuera. "Bueno, voy a dar una vuelta y vengo", dice Herrera que le respondió. "Ella agarró y se tiró haciéndose la víctima", argumentó el chofer en su defensa.
Lo cierto es que la mujer fue hospitalizada con fuertes dolores en sus piernas y la policía secuestró los dos automóviles. Las mujeres que acompañaban a Rojas reconocieron que ella chocó accidentalmente la parte trasera del remís, pero denunciaron que después el chofer la arrastró.
Según informaron fuentes policiales, Herrera quedó detenido por daños y lesiones. Tras ser informada la Justicia, se formalizó la causa y recuperó la libertad.

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