La convocatoria del lunes a la tarde tuvo como punto de concentración la oficina de Derechos y Garantías, en Rivadavia al 400, con el objetivo de visibilizar la problemática de la obstrucción de vínculos que padecen muchas familias de Comodoro.
Lo llamativo es que se demoran las citaciones mientras las cautelares se van prorrogando y en muchas ocasiones alcanzan a los abuelos de una de las partes. De allí la serie de denuncias que se han conocido en los últimos tiempos y que tienen como protagonistas a los titulares de los juzgados de Familia 1 y 2.
Desde la ONG Infancia Compartida en Comodoro quieren que el tema llegue al intendente Juan Pablo Luque. Pretenden que sea intermediario con las autoridades judiciales, a las que les endilgan la característica de “indiferencia” ante sus demandas afectivas.
Verónica Medina, integrante de la ONG “Infancia Compartida” en Comodoro, comentó a El Patagónico que “el impedimento del vínculo es un maltrato infantil y simbólicamente nos hemos juntado un momento para representar este día”.
Sobre este reclamo que vienen llevando adelante desde hace varios meses en las puertas de los Juzgados de familia de Comodoro, la vocera expresó que “no hemos tenido respuestas; estamos viendo todavía que falta mucho por mejorar, no solo en recuperar al hijo, sino también el impedimento en sí: cuando pasa mucho tiempo el daño es irreversible”.
LAS DEMANDAS
Desde Infancia Compartida consideran lógico que la Justicia “siga, controle el régimen de comunicación; verifique cómo está ese nene con esa mamá, con ese papá, algo que hoy en día no vemos”.
Al mismo tiempo, han pedido mantener un encuentro con las autoridades de los juzgados, ya que son abuelas impedidas del vínculo. “Tampoco hemos tenido respuesta; sí un asesoramiento por parte del secretario del juzgado, pero no tuvimos una comunicación directa”, añaden quienes también son víctimas de las denuncias que un integrante de la pareja realiza contra el otro por diversos motivos que van desde la violencia de género al maltrato infantil, pasando por el abuso y sin dejar de tener en cuenta que en muchos casos el denunciado asegura que se trata de falsedades que no tienen ocasión de demostrar porque aún aguardan ser citados a declarar. Es que como se dice siempre: los tiempos de la Justicia no son los del común de los mortales.
Paralelamente, las abuelas quieren establecer contacto con el Colegio de Abogados de la ciudad. “Estamos pidiendo una entrevista para ver algunos puntos en los que tenemos problemas con nuestros representantes y letrados”, apuntó Medina.
En este marco, los familiares pretenden establecer una comunicación con las autoridades municipales. La idea es darle a conocer al intendente el drama que atraviesan muchas familias de la ciudad que aseguran no son escuchados por la Justicia.
“Sería algo muy positivo porque quien mejor que él para que nos ayude a golpear puertas y poder establecer contacto con personas allegadas al Juzgado de Familia”, señalaron desde Infancia Compartida.
Entienden que “son tres juzgados de familia con muchos casos. Hoy son dos jueces que están a cargo de los tres y lo que tenemos entendido es que se pidieron tres jueces más para Comodoro, pero hoy solo están Guillermina Sosa (Juzgado Nº2) y Santiago Huaiquil (a cargo transitoriamente del Juzgado Nº1) atendiendo estos casos”, concluyeron.