La prueba fue admitida por el Tribunal, a pesar de la oposición y de los aspectos técnicos observados por un perito que dispuso la Fiscalía representada por el fiscal general Fernando Rivarola, data de febrero de 2018. El acusador hizo reserva para interponer un recurso ante el Superior Tribunal de Justicia.
El juez Marcelo Orlando (completan el Tribunal Karina Breckle y César Zaratiegui) se limitó a indicar que “los fundamentos ya fueron dados”. Agregó que ese video será “admitido y valorado como se hacen con las otras pruebas”.
Rivarola había pedido al Tribunal que rechace como prueba válida el contenido de las filmaciones contenidas en un pendrive que a último momento del proceso presentó el defensor de Pala.
Se basó en la exposición técnica que como testigo del juicio realizó un perito del Equipo Técnico Multidisciplinario de la Procuración General. Se trata del perito informático Luis Raqueblave.
Rivarola hizo mención a los artículos 161, 162 y 163 del Código Procesal que se refieren a la validez de las pruebas y las consecuencias que devienen de ello. De la exposición del perito, el fiscal concluyó en que los videos existentes “fueron adulterados, manipulados y editados” al no poderse determinar fechas ni el dispositivo que lo tomó.
Al destacar el principio que guía su función, que “es el compromiso de la búsqueda de la verdad”, manifestó al Tribunal que existe la posibilidad de profundizar el análisis del mismo en un Laboratorio de Acústica Forense que tiene la Policía Federal en Buenos Aires, “porque en este debate debió haberse acompañado el video original o la fuente que lo tomó”.
Según el perito Raqueblave, los videos son “incongruentes, no tienen la fuente que lo tomó, tienen fechas que no son precisas, fueron editados y falta más del 70% del video original”. Al ser más concreto y tras otras explicaciones técnicas, dijo que “en dos de los cuatro videos, se intentó limpiar el sitio y reformatearlo nuevamente”.
Agregó que de los datos que surgen y que se cotejaron, resulta que “los mismos son incongruentes si tenemos en cuenta las horas que constan, los días y la duración de los videos. Tienen cortes, como que los videos originales fueron partidos”, dijo.
“No se pudo determinar la existencia de montajes de voz. Para ello se necesitan expertos en lingüística y en sonido. Solo se realizan el Laboratorio de Acústica Forense que tiene la Policía Federal en Buenos Aires”, informó.
Además el Tribunal resolvió que se incorpore, como prueba, un informe técnico en el que se cotejan comunicaciones telefónicas entre Pala y Guillermo Meoqui, con datos surgidos de la filmación que se vio en la audiencia.
Posteriormente, se escucharon los testimonios de Lucas Lema y Guillermo Meoqui, con quien conversa Pala, a la vez que los filma utilizando de manera subrepticia un reloj.
Fuente: Ministerio Público Fiscal.