Una alumna de 15 años que cursa cuarto año de la secundaria de la Escuela 723, ubicada en Lisandro de la Torre y Congreso, ayer a las 13:05 fue asaltada en el portón de ingreso al establecimiento cuando bajaba del colectivo junto a un grupo de compañeras.
El delincuente, que vestía gorra y chaleco, amedrentó con un arma a las cuatro alumnas que acababan de bajar del colectivo. A una de ellas le apoyó la pistola en el estómago y la empujó contra el portón, mientras sus tres compañeras observan paralizadas la escena. “Dame todo. Dame el celular que sé que tenés. Dame todo o te pego un tiro”, exigió el delincuente, quien tras llevarse un celular Samsung Galaxi corrió hacia el barrio Ñiaco.
Se presume que el delincuente observó cuando la joven guardaba el celular tras responderle a su madre a través de un mensaje que ya había llegado al colegio.
A partir de este hecho, se supo que en la última semana es la tercera vez que falla la prevención del Corredor de Seguridad Escolar, un programa que fuera lanzado con bombos y platillos por el Ministerio de Gobierno del Chubut y con el cual supuestamente estaba garantizada en plenitud la seguridad para los estudiantes en el tramo de la avenida Lisandro de la Torre que va desde Polonia hasta Congreso.
Pero lo cierto es que ayer nadie evitó que una menor de edad fuera asaltada con un arma a plena luz del día, en la puerta de la escuela, solo para llevarle su teléfono celular.
Según informó la vicedirectora del colegio, Gladys Triviño, “hay un muchacho que lo tenemos más o menos identificado, que nosotros hicimos la denuncia la semana pasada porque sucedió en dos oportunidades. El chico es ex alumno nuestro y anda drogado, vive por acá cerca. Lo vemos merodear, pero nunca lo vimos hacer nada. Lo vemos en la esquina, donde ataca a los chicos”.
TERRITORIO DE
VIOLENCIA
A raíz del robo sufrido ayer por una alumna, este diario se enteró que la semana pasada habían ocurrido otros dos asaltos similares. En uno de ellos, una alumna logró escapar, pero el delincuente la persiguió hasta el hall mismo del establecimiento educativo, donde le robó el celular.
“Es la misma persona, con la misma descripción, un muchacho joven que le hace eso a los chicos cuando generalmente los ve con el celular en la mano. Se acerca para arrancárselo” dijo la vicedirectora.
El joven al que señalaban ayer los damnificados y directivos se llamaría Jeremías Pérez, quien ya cuenta con antecedentes según la Policía. El delincuente atendió la llamada al celular robado y dijo que eso les pasaba a los alumnos del colegio por “hacerse los copados”.
Las autoridades del colegio sostienen que “llamamos a la Policía e hicimos la denuncia, igual que la semana pasada”.
En cuanto al funcionamiento del Corredor de Seguridad Escolar, Triviño analizó que “nos venía dando resultados hasta la semana pasada, porque habían dejado de suceder los casos”.
Sobre la prevención de la Policía en el lugar, comentó que los efectivos de la Seccional Quinta “andan con cuatri, o se para uno en la esquina. Lo hacen seguido, pero nos han dicho que hay pocos efectivos policiales y que esta zona es bastante ‘caliente’; siempre hay un hecho, un conflicto”.
- 30 octubre 2012