La victoria, con goles de Wayne Rooney (27) y Franck Lampard (60) hizo justicia al mejor juego de Inglaterra, pese a que Brasil se pudo haber adelantado en el 19 con el penal fallado por Ronaldinho, y llegó a empatar el duelo a los 48 con un tanto de Fred.
Ronaldinho no pudo festejar sus 100 partidos como hubiera querido. El penal había sido provocado por él mismo con un centro desde la izquierda que fue interceptado con la mano por el centrocampista Jack Wilshere.
Pero Dinho, que no jugaba en su selección desde el 28 de febrero de 2012 contra Bosnia, lanzó el penal a su derecha y fue despejado por el portero Joe Hart, sin que el propio jugador del Atlético Mineiro ni Neymar pudieran aprovecharse del rebote del arquero de Manchester City.
Tras el penal fallado por Ronaldinho, Inglaterra siguió dominando y llegó el tanto de Wayne Rooney en el minuto 27.
Julio César había resuelto una situación peligrosa cuando Theo Walcott se quedó solo ante el arquero, pero su despeje llegó al delantero del Manchester United, que desde fuera del área marcó su 33 gol en 79 partidos con Inglaterra con un disparo raso que pasó entre los defensores rivales.
En el descanso, Scolari decidió hacer tres cambios. Fred entró por Luis Fabiano, Lucas por Ronaldinho y Arouca por Ramires.
Y los cambios pronto tuvieron su efecto, ya que Lucas se aprovechó de un error de Gary Cahill, para robarle el balón y ceder a Fred quien batió a Hart en el 48.
Brasil estaba despertando en el segundo tiempo, pero cuando parecía que podía ponerse por delante, Rooney se aprovechó de una indecisión en el despeje de la defensa rival para ceder hacia atrás a Frank Lampard, que había entrado tras el descanso, quien lanzó un disparo que entró tras tocar en uno de los postes.