El vacío legal histórico sobre el servicio de grúas se hizo evidente en las últimas horas cuando una unidad de este tipo de servicios fue contratada por un particular, que bajo pretexto de contar con un boleto de compraventa ordenó el remolque del automóvil de un tercero hasta la fracción 14.
Así lo informó el concejal Pablo Martínez (UCR), quien comunicó que ya se ha solicitado el relevamiento legal al equipo de asesores del cuerpo legislativo para que durante las sesiones de marzo la ciudad pueda contar con la reglamentación del servicio que incluirá, entre otros puntos, la necesidad de llevar un registro de órdenes de traslado realizados.
El edil expuso que las grúas son utilizadas hoy dentro de un nuevo “modus operandi” delictivo, levantando vehículos de la vía pública sin la correspondiente autorización de los propietarios, y que la inexistencia de regulación habilitaría incluso la posibilidad de que se contrate una grúa en otro ejido, Sarmiento por ejemplo, y se remolque un vehículo hasta un desarmadero de esa localidad.
Si bien el ejemplo resulta extremo, es un hecho plausible dada la imposibilidad de control en función de la inexistencia de normativa vinculada.
“Lo que pretendemos es que dentro del ejido se cree un registro de prestadores, en el que además fijen domicilio porque sino solo aparece un celular como responsable, y no hay dirección donde constatar el desarrollo lícito de la actividad. También debemos tener un control, a través de ese mismo empadronamiento municipal, del cumplimiento de las normas que emanan de la ordenanza de emergencia en seguridad”, resumió.
Otro eje, y a colación del ejemplo mencionado, es alentar el desarrollo de la actividad en Comodoro Rivadavia y que no se vea perjudicada por el ingreso de grúas de otras localidades, sobre las que no existe hoy el control por no estar regulado ni legislado. “En esto vamos a trabajar para poder implementar los controles a partir de marzo”, señaló.