El volante ofensivo colombiano estuvo en el banco en el triunfo ante Atlético Tucumán, mientras que el defensor platense fue preservado por una contractura y tampoco se perfilaba para jugar en el debut por CONMEBOL Libertadores ante The Strongest el próximo miércoles en la altura de La Paz. Ahora ambos quedan completamente descartados y deberán respetar el aislamiento.
La situación prende las alarmas en un cuerpo técnico y plantel que deben viajar a Bolivia para su debut en la nueva edición de la Copa Libertadores, el gran sueño del club que no la gana desde 2007. El año pasado se quedó en semifinales al ser goleado por Santos y en 2019 tampoco superó esa instancia; esa vez al ser eliminado por River.
En 2018 perdió la final de Madrid, también con River, mientras en 2017 directamente no la jugó por no clasificar. En 2016 su verdugo fue Independiente del Valle, de Ecuador, en semifinales, y en 2015 no pasó los Octavos: también entonces lo eliminó River.