La jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado, ex esposa de Alberto Nisman, participa este miércoles por la tarde acompañada por sus dos hijas, Iara y Kala, de la marcha del silencio convocada por un grupo de fiscales y jueces, a un mes del fallecimiento del fiscal.
En medio de una intensa lluvia, Arroyo Salgado llegó con sus dos hijas y se ubicó en un cerco donde se encontraban los organizadores del 18F, previo al inicio de la movilización, que partió pasadas las 18 desde la plaza Dos Congresos hasta Plaza de Mayo. Luego, arribó la madre del fallecido fiscal, Sandra Garfunkel, para sumarse a la peregrinación.
A pesar del diluvio -especialmente en el inicio de la protesta- y la amenaza de tormentas con actividad eléctrica y probable caída de granizo, las personas participan de forma pacífica y en medio de una marea de paraguas, de la marcha que tiene como fin rendirle homenaje a Alberto Nisman, además de reclamar justicia por su muerte, que sigue siendo un misterio.
La movilización fue convocada con la estricta consigna de guardar silencio, debido a lo cual no está prevista la realización de ningún acto ni manifestación, aunque pudieron observarse pancartas con el rostro de Nisman y consignas como "verdad y justicia" alusivas al pedido de esclarecimiento de las causas de su muerte.
En un tramo de la caminata, la cabecera de la marcha se detuvo frente a la sede de la Procuración General de la Nación, que encabeza la procuradora Alejandra Gils Carbó, y entonaron allí el Himno Nacional, tras lo cual retomaron hacia la marcha a Plaza de Mayo.