Desalojan de un departamento de las 1.008 a una madre con cuatro niños

Tras cumplirse el desalojo por orden del juez penal José Rago, la mujer acompañada de sus pequeños hijos reclamó ayer con una quema de cubiertas por un lugar donde vivir. Hace tres días, la “hija del barrio” había usurpado uno de los departamentos del edificio 82 del barrio 30 de Octubre.
Personal policial de la Seccional Quinta cumplió ayer alrededor de las 11 con un desalojo en el complejo habitacional 1.008 Viviendas, donde la diligencia que realizó con tranquilidad.
Laura Oñatibia, de 23 años, la expulsada de dicho departamento, manifestó en diálogo con Diario Patagónico que esperó largas horas a funcionarios municipales y nadie se acercó para brindarle una respuesta al problema habitacional que sufre con sus pequeños hijos.
La mujer había usurpado el departamento “A” del edificio 82, en el sector 8, hace tres días y la orden de allanamiento se emitió de inmediato. Dicha rapidez resulta curiosa, ya que existen más de treinta ocupaciones en el mismo vecindario protagonizadas por conocidos delincuentes con pesados antecedentes penales, pero las familias damnificadas no lograr recuperar sus inmuebles por la lentitud de la Justicia en esos casos.
La orden fue otorgada por el juez José Rago y Oñatibia se quejó de que la Justicia debería haberle dado un plazo mayor para retirar sus pertenencias. “En dos horas tenía que estar afuera. Si no salía iban a entrar (la policía) con puerta y todo habiendo chicos adentro porque yo estaba sola”, explicó.
La mujer con sus hijos Agustina (7), Esteban (5), Joaquín (3) y Enzo (1) dejó los colchones y bolsas con efectos personales en el palier e inició un reclamó en las puertas del edificio. De esa forma, la “ocupa” efectuó una quema de cubiertas para manifestar su necesidad habitacional.
“No vino nadie, estuve esperando que venga alguien a darme alguna solución. Estoy sola con los chicos y necesitaba un lugar a donde estar”, sentenció.
El departamento estaba desocupado hace más de dos meses, “me metí y vino la dueña” identificada por la policía como Angélica Teresa del Valle Toledo.
Oñatibia explicó que la propietaria “tiene una casa donde estar y en vez de alquilármela, yo le dije que tengo cuatro chicos y no le importó, y no llegamos a ningún arreglo”, aseguró.
Finalmente, la mujer desalojada aseguró: “yo me voy a quedar acá hasta que consiga una respuesta”. Adelantó que hoy se dirigirá hasta el municipio a pedir una inmediata respuesta a su problema habitacional.

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