Quien arrojó la primera piedra fue el intendente de Comodoro Néstor Di Pierro, el cual advirtió que se evaluaba la posibilidad de avanzar en el cobro de una tasa de seguridad al momento de inaugurar un nuevo espacio para el Centro de Monitoreo de la ciudad.
En consonancia con estos dichos, el secretario de Seguridad José Glinski, comentó a través de Radiocracia, que habló respcto a este tema con Di Pierro “hace algunos meses” basados en las experiencias positivas que consiguieron algunas localidades de Buenos Aires que implementaron la tasa. En este sentido, Glinski dijo que es una “idea para nada descartable”.
“No me parece mal”, dijo el secretario y consideró que tendría el apoyo de la comunidad por la preocupación que genera la seguridad.
No obstante, advirtió que la tasa “debería tener un destinos que los vecinos puedan ver”. De este modo, indicó que se podría contribuir no solo a combatir la inseguridad, sino también el temor que tiene la comunidad a la hora de transitar. Por lo cual consideró que “si la idea circula vagamente habría que darle un poquito más de forma”.
PARA LINARES SERÍA “UNA ABERRACIÓN"
Por su parte, el viceintendente de la ciudad, Carlos Linares, en declaraciones efectuadas en el mismo medio intentó bajar las expectativas en cuanto al posible cobro de la tasa y advirtió que “no hay nada todavía”, salvo “una conversación en un encuentro con vecinalistas”.
Además, el viceintendente manifestó que no se puede pensar en tratar el posible cobro de una tasa “antes de tener todas las cámaras de seguridad” porque según su parecer “sería una aberración cobrar por seguridad en este momento”.
No obstante, Linares indicó que sí se evalúa en este momento la posibilidad de inversión en conjunto con provincia para efectivizar la compra de cámaras para la cual se destinarían fondos propios. Y también renovar el mecanismo de retenes porque al estar fijos no generan demasiados resultados en un ámbito que hoy está “entre las prioridades de la gestión municipal”.