El oficialismo argumenta que Uzal no puede asumir por incompatibilidad dado que tiene un contrato con el Municipio. El tema ya fue planteado con anterioridad y el concejal fue destituido por lo que recurrió a la justicia. El dictamen judicial fue la restitución al cargo, aunque la causa continuó y aún hoy no hay sentencia.
A juicio de la UCR, la situación “provoca un conflicto de poderes, ya que el Concejo está decidiendo una situación judicial y decide en 15 minutos un tema que a la Justicia le está llevando años”, recordando que en la sesión preparatoria “se sentenció sin el debido proceso y sin oportunidad de defensa al concejal. El Concejo se transformó muy rápido en un tribunal y dictó su fallo”.
Por eso Uzal consideró que la primera sesión del Concejo Deliberante de Dolavon, a concretarse hoy, “marcará un punto de inflexión en la vida democrática de la localidad”, dijo el propio Uzal a través de una carta pública. Es que en el recinto habrá una banca vacía que -según indicó- “exhibirá como un emblema la Unión Cívica Radical; será un espacio de la resistencia”.
Los concejales del Valle Inferior del Río Chubut y Puerto Madryn reunidos días pasados denunciaron que Uzal no pudo asumir por “impedimento de la mayoría que gobierna en esa localidad”, Incluso indicaron que “veríamos con mucho agrado que el Concejo Deliberante de Dolavon levante esa proscripción hacia el radicalismo como partido”.
MANIOBRAS
Uzal encabezó la lista de candidatos a concejales en las elecciones del año pasado y “debió sortear todos mecanismos legales, administrativos y electorales para ser elegido por su comunidad y hoy se le niega la posibilidad de asumir a través de una maniobra política del justicialismo que una vez más desoyendo la voluntad popular y los procedimientos antes mencionados, no le permite asumir”.
El caso que está judicializado es para la UCR un acto que atenta “contra la voluntad popular del pueblo de Dolavon, contra la democracia y contra el partido”.
Por eso pidieron a los miembros del Concejo Deliberante “que reconozca lo que el pueblo votó y en un acto de grandeza, reconocimiento y humildad, retrotraiga esta medida y no proscriba al primer concejal de la UCR”.
Uzal habló de “persecución política” y acuso al intendente de emprender “acciones claramente fascistas. De una persona que ha hecho del particularismo una doctrina y que cree ser omnipotente, es impensable que pueda comprender el daño cívico, irreparable, que le está ocasionando a toda la juventud dolavense”.
Luego afirmó que denunciará “todo acto ilegal y antidemocrático que lleven adelante los concejales del oficialismo detrás de quienes está, cumpliendo la doble función de ideólogo e instigador, el intendente Bortagaray”.
- 22 febrero 2012