Caleta Olivia (agencia)
La mujer de 45 años había sido sometida a una intervención quirúrgica para colocársele una malla por un defecto herniario (hernioplastia), operación que habría estado a cargo de la doctora Bettina Persani, pero su cuadro clínico se complicó y falleció en horas de la mañana de ese mismo lunes.
Sus hijos, de apellido Infante, buscaron a la médica para que le diera explicaciones al considerar que lo sucedido se debió a una mala praxis, pero les habrían dicho que la misma se hallaba de viaje, lo cual los indignó y pocos minutos después de las 17 volverían, ya sumidos en un cuadro de ira.
Una mujer policía que cubría un turno de vigilancia regular en el hall de acceso ubicado en la planta baja los vio subir raudamente por la escalera que lleva a la UTI y percibió que uno de ellos llevaba en su mano un arma de fuego.
Ella no estaba armada pero igualmente le dio la voz de alto y por toda respuesta el joven que portaba una pistola 9 milímetros le grito: “con vos no es la cosa” y siguió avanzando hacia el primer piso.
La policía llamó inmediatamente a otros uniformados que se hallaban en el Hospital custodiando a un detenido judicial y también al personal de una agencia de seguridad privada que se encontraba en la sala de guardia de planta baja. El alerta también llegó a la Comisaría Seccional Primera y al Comando Radioeléctrico, por lo cual en contados minutos varios patrulleros arribaron al nosocomio.
LOS REDUCEN
Los uniformados ascendieron rápidamente hasta los pasillos de la UTI en la que en esos momentos había varios particulares porque era horario de visita.
Los hermanos Infante habían amenazado el personal hospitalario y exigían la presencia de la doctora Persani, en tanto varios policías procuraban calmarlos, sobre todo al que portaba el arma de fuego, cuya edad ronda los 25 años.
En un descuido del mismo, un suboficial de la Comisaría Primera se le abalanzó y le quitó el arma; luego fue reducido al igual que su hermano, siendo trasladados a la citada dependencia policial.
Más tarde debieron comparecer ante el titular del Juzgado de Instrucción N° 2, Gabriel Contreras, quien le imputó a uno de ellos el delito de “abuso de arma” y al restante “resistencia a la autoridad”.
Sin embargo, el magistrado dispuso que quedaran en libertad por un principio humanitario ya que los jóvenes debían hacerse cargo del velatorio y sepelio de su madre, pero les impuso una prohibición de acercamiento al hospital y sobre todo a la doctora Persani, a la cual también se le asignó una custodia policial.
CONDOLENCIAS DE LA DIRECCION HOSPITALARIA
A media mañana de ayer, en nombre de todo el personal del nosocomio público, la directora general Patricia Zari expresó sus condolencias a todos los familiares de la paciente fallecida, dejando sentado que “nuestro equipo hospitalario trabaja en función de preservar la salud y la vida de las personas”.
Indicó además que a veces, por cuestiones de evolución de una enfermedad u otras complicaciones, se produce un desenlace fatal como fue el caso de la mujer sometida a una hernioplastia y ello hizo que “todo nuestro equipo de salud esté entristecido porque somos humanos, trabajamos con humanos y lo que le pasa a un paciente obviamente nos afecta”.
Por otra parte, en clara referencia a numerosos hechos de violencia que se registraron con anterioridad en este hospital, sobre todo en la sala de guardia de urgencias, consideró que en esta comunidad hay personas irascibles que agreden al personal de salud que se encuentra en situación de vulnerabilidad.