Tal como lo anticipó en exclusiva Diario Patagónico, se llevó a cabo ayer la audiencia de impugnación de sentencia por el homicidio del estudiante de Geología oriundo de Río Senguer, Alejandro Balle, ocurrido el 25 de julio de 2013 en la vivienda que alquilaba en Kilómetro 5.
El tribunal de la Cámara Penal fue presidido por el juez Daniel Pintos e integrado por Guillermo Müller y Martín Montenovo. La parte acusadora estuvo representada por el fiscal general Adrián Cabral, mientras que la querella la ejerció el abogado particular, Juan Carlos Smith. En tanto, Alejandro Lezcano fue representado por la defensora pública, Viviana Barillari, y Santiago Israel Reuter por el letrado privado, Miguel Donnet.
“SOLO QUERIA ASUSTARLO”
Como la audiencia de ayer era por la impugnación de las defensas, correspondía escucharlas a ellas en primer término y así fue como se expresó Barillari, actual abogada de Lezcano luego de que éste echara a quien lo patrocinaba antes por considerar que lo había perjudicado durante el juicio.
Al respecto, esa parte solicitó que se decrete la inaplicabilidad de la prisión perpetua porque entiende que “todos los dichos de los testigos refirieron que el disparo fue de forma accidental. Escucharon que el disparo se le había escapado; lo único que quería era asustarlo y nada más”.
Más adelante la abogada sostuvo que "el tribunal de juicio no evaluó esto", en relación al disparo accidental, y pidió como calificación alternativa la de "homicidio en ocasión de robo”.
“Nada explica por qué no se consumó el robo en el local ‘Game Over’. Mi defendido no quería causar la muerte", aseguró y agregó que la pena de prisión perpetua viola el principio de resocialización del condenado, por lo que solicitó a los jueces que se aplique la calificación legal de homicidio en ocasión de robo, la cual tiene penas que van de los 10 a los 25 años de prisión.
A su turno Donnet -el asesor de Reuter- pidió que se declare nula la sentencia de primera instancia (a 10 años de prisión) por considerar que se violó el principio de congruencia, advirtiendo incoherencia respecto del veredicto de responsabilidad, la condena aplicada y la calificación del delito atribuido a su defendido.
“Alejandro Lezcano y no otro fue el que cometió el homicidio y no se ha probado la unión de voluntades entre los tres encartados para cometer el homicidio. Espinosa fue sobreseído”, recordó, advirtiendo luego que los fundamentos no se condicen con la pena que se le aplicó a Reuter por lo que la figura legal escogida -robo agravado por el uso de arma de fuego- carece de sustento. No pudieron individualizar su presencia ni la de los otros ocupantes del auto”.
En virtud de ello el abogado reclamó la absolución y subsidiariamente que se readecue la calificación legal a robo en grado de tentativa.
“HUBO INTENCION DE MATAR”
En contraposición, el fiscal Cabral dijo que respecto a Lezcano la sentencia debe ser confirmada en todos sus términos. Ello en virtud de que el tribunal evaluó la violencia ejercida sobre la víctima, el paso de un proyectil por el cráneo y el traumatismo por fractura del hueso parieto occipital como consecuencia de un golpe muy fuerte, compatible con un golpe de arma.
“Sí hubo intención de matar, primero por ese golpe y posteriormente el disparo”, afirmó el acusador público y agregó que la finalidad era sacarle las llaves y la alarma del local comercial.
“No hubo disparo accidental”, insistió y pidió que se rechace la impugnación y se confirme la sentencia en todos sus términos para Lezcano.
En tanto, sobre la situación de Reuter recordó que la Fiscalía presentó un recurso extraordinario ante la Sala Penal del Superior Tribunal de Justicia provincial para que se readecue su imputación como coautor de “homicidio criminis causa”. Por eso que se opuso a la nulidad planteada por el defensor, atento a la falta de fundamentos para esgrimir la nulidad.
El querellante, por su parte, también solicitó al tribunal que sea confirmada en todas sus partes la sentencia de primera instancia y destacó que la muerte de Balle se produjo de manera violenta y voluntaria; con la intensión de matar y de quitarle la llave y la alarma del negocio para cometer otro ilícito. En cuanto a Reuter sostuvo que no existe contradicción entre los considerandos y la parte resolutiva de la sentencia ya que prestó ayuda a Lezcano como chofer para llevarlo hasta el lugar del hecho.
Tras escuchar a las partes, el tribunal ofreció la palabra a los familiares y de esa manera se pudieron expresar tanto la madre como el padre de Alejandro Balle. La mujer se dirigió a Lezcano y le pidió que dijera “la verdad” porque ello le daría más alivio que el hecho de saber que él está preso, algo sobre lo que se lamenta porque preferiría que estuviera estudiando o criando a su hija, a quien le deseó que nunca le falte nada.
Por último, Lezcano insistió en que él no fue a matar sino que el disparo se le escapó, asegurando que no era su intención causar un daño irreparable.
El Tribunal dio por cerrada la etapa de impugnación para pasar a resolver y convocó a las partes para el próximo viernes.