Gabriel “Larry” Figueroa, condenado a perpetua por el homicidio del adolescente Matías Berardi y recapturado anteanoche tras escapar de la cárcel de Marcos Paz el 25 de enero último, confesó a la Policía que tenía previsto hacer un “secuestro millonario” y luego fugarse del país, informaron ayer fuentes judiciales.
Figueroa (28) fue apresado anteanoche en la localidad bonaerense de José C. Paz cuando iba a bordo de un Chevrolet Corsa gris plateado con un remisero, luego de un seguimiento que venía realizando el departamento de inteligencia del Servicio Penitenciario Federal (SPF).
Los investigadores pudieron determinar que desde que se fugó hace 24 días, “Larry” se movía por esa zona y por la vecina localidad de San Miguel, en el noroeste del conurbano.
Según dijo a Télam un vocero judicial, para la detención fue clave un mensaje de texto enviado por Figueroa a presuntos cómplices en el que decía: “Mandame a buscar porque me están siguiendo. Vengan rápido. Estoy muy nervioso”.
De esa forma, pudieron ubicarlo y los efectivos del SPF lo detuvieron en la calle Croacia y ruta 197, de José C Paz, con colaboración de policías de la subDDI Pilar.
ARMADO
El jefe de la DDI San Isidro, Sergio Rodríguez, aseguró que a Figueroa se le secuestró un celular, una pistola 9 milímetros marca Glock, un cargador intacto y municiones de punta hueca y teflonada, que tienen mayor poder de daño.
Junto a él se detuvo a un cómplice identificado como Eduardo Aube (31), que trabaja como remisero.
Una fuente judicial indicó que “Larry” confesó al momento de ser detenido que estaba por hacer un nuevo secuestro a una persona “muy conocida y de mucho dinero” y luego pretendía escapar del país.
Mientras, el director del Departamento de Inteligencia del SPF, Cristian Suriano, explicó que “se lo pudo aprehender (al prófugo) gracias a escuchas telefónicas, seguimientos, vigilancia táctica y encubierta”, lo cual calificó como “un arduo trabajo que se ha coronado con éxito”.
Suriano sostuvo que Figueroa no tuvo tiempo de resistirse por la rapidez del operativo, y que sin dudas lo hubiera hecho por el armamento con que contaba.
Tras la detención, el condenado por el crimen de Berardi fue trasladado al Centro de Detención Judicial (Unidad 28), ubicado en el Palacio de Tribunales porteño.
Está previsto que hoy declare ante el juez federal 2 de Morón, Claudio Daniel Galdi, y después sea trasladado al Complejo Penitenciario Federal I de Ezeiza.
María Inés Daverio, madre de Berardi, dijo que está “muy agradecida por el trabajo de la Policía y la Justicia en la búsqueda del prófugo”.
“El capturado es una persona muy peligrosa, y es capaz de hacer cualquier cosa para lograr fugarse otra vez. Ahora queremos que lo lleven a un penal de máxima seguridad por su peligrosidad”, exigió la mujer.
La fuga de “Larry” y Luciano Javier Campos, quien fue recapturado el 9 de febrero por la Policía Metropolitana, fue descubierta el domingo 25 de enero, cuando los guardias hacían el recuento de presos alojados en la Unidad Residencial II de Marcos Paz.
De acuerdo al SPF, los detenidos habían sido trasladados la noche del sábado, luego de cenar, al salón de usos múltiples de la unidad, donde se cree que los presos atravesaron una ventana rota para acceder a un patio externo.
Esa misma madrugada, Figueroa asaltó a una pareja en un country de la localidad de Cañuelas y la llevó cautiva hasta el partido de La Matanza, donde la liberó cinco horas después, tras robarle dinero y una camioneta.
Cuando se fugó de la cárcel, “Larry” Figueroa cumplía una condena a prisión perpetua por el secuestro y crimen de Berardi, asesinado en 2010 en la localidad bonaerense de Campana tras ser secuestrado cuando llegaba de bailar e intentar escaparse de sus captores.