El nuevo acuerdo será dado a conocer en los próximos días con el fin de frenar maniobras engañosas llevadas adelante por las empresas que afectan a los bolsillos de los consumidores.
"Esta política implicará poner la lupa en los balances de las empresas de manera integral, y se tomarán todas las medidas al alcance del Poder Ejecutivo, para que las empresas se aboquen a cumplir con los acuerdos alcanzados, pero también para impedir que las firmas efectúen "avivadas" que disparen los precios de productos similares sin fundamento económico real, y tal como se produjeron durante los últimos meses en varios casos", afirmaron fuentes del Palacio de Hacienda.
En diálogo con Télam, los voceros de Economía aseguraron que "no se aplicará congelamiento de precios, sino una política de administración de los mismos, donde trabajaremos en toda la cadena, y fundamentalmente en los proveedores", que es el eslabón donde se encontraron distintas maniobras abusivas.
Según las fuentes, la política de administración de precios no se circunscribirá a monitorear solo los 187 productos que integrarán el nuevo acuerdo que comenzará a regir el 1 de enero próximo, sino también a alrededor de los 10.000 productos que son exhibidos en las góndolas de las 40 principales cadenas de supermercados del país y en los 80 proveedores que las abastecen, en lo que refiere a alimentos, bebidas, productos de perfumería y de limpieza.
Los 187 productos que integrarán el nuevo acuerdo serán todos de primera necesidad y en su mayoría alimentos y bebidas, los que acapararán las tres cuartas partes de la canasta seleccionada.
Las fuentes del Ministerio de Economía advirtieron que a las empresas que incumplan los acuerdos o realicen "avivadas", del estilo de remarcar productos similares con cifras exorbitantes, se les aplicarán las "distintas figuras legales disponibles tendientes a corregir esos desvíos", como la denuncia por abuso de posición dominante, la aplicación de la Ley de Defensa del Consumidor, la fiscalización a través de la AFIP para detectar irregularidades en los precios y los balances de las compañías, entre otras alternativas.
Con esta información se intentará persuadir a las empresas a que cuando quieran aumentar los precios, lo hagan por una real necesidad de costos y no por expectativas infundadas o "avivadas".