En la primera ronda del Mundial de Rusia 2018, Wilfredo Caballero tuvo un error fatal que lo condenó al tratar de salir jugando. Aquella vez le regaló la pelota a un rival, que terminó en gol de Croacia. Argentina perdió 3-0 y se complicó mucho, aunque finalmente pudo clasificar a los octavos de final, donde la humilló Francia.
Este lunes, otro arquero con el buzo naranja de Adidas volvió a sufrir un blooper ante el mismo rival. Se trata de Unai Simón, que curiosamente hasta porta el mismo número que Caballero por entonces: el 23.
El arquero de España quiso controlar un pase desde mitad de cancha, pero la pelota se le escurrió del pie y terminó adentro del arco. Así es cómo su equipo comenzó a perder en los cuartos de final de la Eurocopa.
¿Acaso es la maldición del buzo naranja? La alegría es toda croata.