Un simulacro de contención de derrame y saneamiento de hidrocarburos en el mar se realizó ayer en la desembocadura del arroyo Belgrano, debajo del puente histórico del barrio Presidente Ortíz, sobre las playas de Kilómetro 4.
La actividad consistió en un gran despliegue de recursos e interacción entre autoridades de organismos públicos, privados y empresas del sector, activando roles de emergencia ante este tipo de contingencia.
En este sentido, el subsecretario de Medio Ambiente, Fabián Suárez, expresó que “esta actividad incorpora medidas de prevención ante eventualidades que puedan surgir. En este simulacro intervienen muchos actores para ver cómo se actuaría en una contingencia y sobre todo para buscar mejoras operativas y así confeccionar un mejor plan para actuar lo más eficientemente posible”.
“Se planeó un evento extraordinario que en la realidad tiene bajas probabilidades de que ocurra. En el mismo, se produce un gran derrame de hidrocarburos en aguas arriba del arroyo Belgrano, sumado a un día donde hay una lluvia excepcional, lo cual hace que llegue el hidrocarburo al mar. En este caso, lo que se realiza son las tareas para contener el hidrocarburo, captarlo y que no se distribuya en las playas ni mar adentro”, agregó.
TRABAJO EN CONJUNTO
En el simulacro participó personal de la Municipalidad de Comodoro Rivadavia, con personal operativo de las subsecretarías de Medio Ambiente, Defensa Civil y Tránsito; además de Prefectura Naval, Ministerio de Ambiente y Control del Desarrollo Sustentable del Chubut y empresas privadas del sector como YPF y Termap (Terminales Marítimas Patagónicas). Entre las herramientas empleadas se destacaron hasta mecanismos manuales de sobrevuelo para brindar mayor información de la zona afectada.
Suárez destacó el procedimiento y afirmó que “primero se hizo un rol de llamados a las personas previstas, que funcionó bien”.
En la parte operativa se realizaron contenciones de hidrocarburos en tierra, succionando en el arroyo Belgrano. Luego se colocaron otras contenciones mediante embarcaciones con una serie de mangas, tipo polleras, que flotan justamente para que no se extienda más allá la mancha de petróleo en el agua.
Uno de los derrames más importantes del último tiempo ocurrió en la monoboya de Caleta Córdova en horas de la madrugada del 26 de diciembre de 2007. Fueron más de 300 metros cúbicos de hidrocarburo los que afectaron el ecosistema. El crudo llegó en cuestión de horas a la costa, ocasionando daños de proporciones para la flora y fauna marítima.
- 20 diciembre 2013