Bajo un inmenso dolor que nunca cerrará las heridas de la pérdida de tres de sus integrantes, la familia Epulef ayer concurrió una vez más a los tribunales del barrio Roca para tratar de encontrar justicia por el crimen de Franco. Era el menor de los hermanos, tenía 16 años y fue ultimado de un disparo en el tórax.
La víctima falleció en los brazos de su hermano Diego, quien el 25 de octubre encontró la muerte tras ser atacado a tiros el domicilio de la familia, en el barrio Máximo Abásolo. Y en la primera de las desgracias, Eliana fue asesinada de un tiro en la puerta de su casa el 15 de marzo de 2010.
El tribunal estuvo integrado por los jueces Hugo Juárez, Alejandro Soñis y Daniela Arcuri. Al Ministerio Público Fiscal lo representó el fiscal general Adrián Cabral y por la querella de la familia asistió la abogada Verónica Heredia. La defensa de Enzo Ariel Levián (25) estuvo ejercida por Guillermo Iglesias.
En su reconstrucción, el fiscal sostuvo que va a probar a lo largo del juicio la autoría del actual detenido por el asesinato. Recordó que esa madrugada la víctima, junto a sus dos hermanos (Diego y Hugo), habían salido de un local bailable de La Loma y caminaban por Viamonte y San Martín, frente a la Sociedad Cooperativa Popular Limitada (SCPL) cuando se produjo el ataque.
Levian llegó a bordo de un Volkswagen Bora acompañado con dos integrantes de la familia Vera. Estos últimos bajaron, discutieron y se pelearon a golpes de puño con los Epulef. Entonces, el acusado descendió del auto empuñando un arma de fuego y efectuó un disparo que terminó con la vida de Franco.
HOMICIDIO AGRAVADO
En esos términos Cabral calificó el delito como homicidio agravado por el uso de arma de fuego, en calidad de autor para Levián, y expuso una pretensión punitiva de 15 años de prisión en caso de ser declarado culpable.
Por su parte, la querella adhirió en todos sus términos el extenso relato del acusador, como así también a la calificación jurídica del crimen. En contraposición, Iglesias postuló la teoría negativa del caso, es decir que el acusador público y privado no van a poder probar la autoría de Levián en el crimen.
El defensor argumentó que “si el tribunal considerase acreditada su participación, será bajo la calificación de homicidio en exceso en la legítima defensa, legítima defensa putativa, y subsidiariamente homicidio culposo. No se va a poder probar la existencia del injusto.
Levián accedió a declarar, remarcando que no posee antecedentes penales y se definió como una persona “sociable, respetuoso y trabajador”. Explicó que tenía armas porque le gusta el deporte de caza y pesca. “No quise hacerle daño a la familia Epulef”, sostuvo.
En otro tramo, el acusado expresó que tiene miedo que los Epulef tomen represalias contra su familia, recordando que todo empezó en el boliche y aseguró que la agresión provino de los hermanos Epulef: “quise intimidarlos tirando tiros al aire”.
Luego prestó testimonio del hermano de la víctima, Hugo, quien señaló que Levián junto a los hermanos Vera comenzaron a provocarlos dentro del boliche. Ya cuando iban por calle Alem los presuntos agresores los amenazaron diciéndoles que los iban a matar.
Minutos después “sobre Viamonte nos cruzan el auto”, se bajan los Vera y comienza la pelea. Luego Levián también desciende y “empieza a los tiros con mi hermano Franco, que cae”. El testigo recordó que su hermano había sido amenazado por los hermanos del “Pollo” Vera.
Finalmente se escucharon los testimonios de un testigo de actuación del allanamiento y la detención del imputado en su domicilio y de un oficial de la Brigada de Investigaciones que efectuó un informe fotográfico del video.