Un delincuente encapuchado y con una “tumbera” -como son conocidas las armas de fabricación casera- pateó la puerta de una vivienda ubicada en calle Código 555 al 2.000 del barrio San Cayetano y se llevó todo lo que pudo en contados minutos. El delincuente, que irrumpió sobre las 5:30 en la vivienda en la que dormían dos adolescentes de 13 y 16 años que estaban solos, les quitó dos teléfonos celulares, una consola Play Station y la ropa que tenían en su dormitorio. Además, se llevó alhajas y bijouterie de fantasía. En ningún momento dejó de apuntar a sus víctimas. También se llevó una guitarra.
Vecinos y familiares de las víctimas del asalto se reunieron preocupados por el hecho, señalando que habían hecho denuncias a partir de haber visto a un sospechoso desde hace varios días en los techos de las casas.
Hay que recordar que a fines de diciembre del año pasado, vecinos del barrio Máximo Abasolo, a raíz de un violento asalto a un anciano de la calle 552, le habían pedido la intervención al concejal Mario Soto, quien reside en la zona para llevar la queja por la inseguridad en el sector ante las autoridades municipales.
En aquella oportunidad, los vecinos expusieron ante este diario que observaban cómo algunos jóvenes identificados con nombre y apellido actuaban “con total impunidad” en el vecindario y que estaban cansados de los robos.
La investigación de este episodio de inseguridad corre por cuenta de la Seccional Sexta y de personal de la Brigada de Investigaciones.