Los restos de Horacelia Génesis Marasca, la joven de 16 años que estaba desaparecida desde el último 16 de agosto y cuya pareja y padre de su bebé de siete meses confesó haberla matado y descuartizado, fueron encontrados en la zona oeste de la capital misionera de Posadas en bolsas de residuos tipo consorcio, informaron fuentes policiales.
El cadáver de Horacelia era buscado por las autoridades luego de que su pareja, identificado como Martín Monzón (34), confesara, ante la Policía inicialmente y al juez que interviene en la causa después, que la había asesinado durante una discusión en su casa del complejo habitacional Chacra 150, en el barrio posadeño de Villa Cabello.
Según dijeron los voceros consultados, las extremidades de la víctima fueron encontradas -el viernes por la noche- en bolsas a orillas del arroyo Mártires, mientras que otras partes del cuerpo fueron localizadas en una zona más alejada, pero siempre en la ribera de ese curso de agua.
Las bolsas encontradas fueron trasladadas a la morgue judicial por orden del juez que interviene en la causa, Ricardo Balor, en tanto que ayer continuaba el rastrillaje en busca de una última bolsa, ya que las fuentes señalaron que el cadáver aún no estaba completo.
El viernes, el hombre declaró durante tres horas frente al juez que lleva la causa, Ricardo Balor, y en medio de un quiebre emocional dijo que tras una pelea ocurrida ese 16 de agosto, apuñaló varias veces a su concubina con un cuchillo tipo carnicero de mango blanco y luego se encargó de fraccionar el cuerpo para ir sacando los pedazos en partes en el cochecito del bebé.
Algunos vecinos que ya declararon en la causa aseguraron que la joven desaparecida era víctima de maltrato por parte del hombre actualmente detenido. Si bien nunca había hecho la denuncia policial, Horacelina había contado distintos episodios de violencia a su madre, a su hermana y a algunas amigas.
Luisa, encargada de un comedor ubicado en el barrio donde vivía la pareja, contó a la prensa que la pareja mantenía "una relación conflictiva y violenta" desde hace tres años y que el hombre prácticamente no la dejaba salir de la casa ni tener amigas.
"Horacelia venía a comer acá, llevaba comida para el bebé porque el marido le vaciaba la heladera", afirmó la mujer, quien la recordó como "una buena chica, muy linda y lastimosamente le tuvo que pasar esto".
La joven había desaparecido el domingo 16 de agosto, según había denunciado su madre Norma Benítez ante la comisaría 7ma. de la ciudad, ubicada a sólo dos cuadras del domicilio de la pareja.
En una primera exposición ante la policía, Monzón había manifestado que no sabía nada del paradero de su concubina, pero llamó la atención tanto de su familia como de las autoridades que la joven se hubiera ausentado sin llevar consigo dinero, ropas, ni -especialmente- al bebé de siete meses que tenían en común.
Finalmente, el jueves de esta semana el juez Balor dispuso la detención de Monzón por la desaparición de Horacelia, y el hombre, quien tenía antecedentes por violencia de género, se quebró y confesó cómo la había matado.