Hace casi un año que vecinos de la calle Wilde esperan el asfalto

Los habitantes de la calle Wilde, entre Malvinas y pasaje Machado, expusieron ayer los inconvenientes que padecen hace once meses cuando iniciaron los trabajos de pavimentación. La calle está cortada, posee montículos de tierra y se inunda cuando llueve.

Lo que sería un beneficio para los contribuyentes de ese sector del barrio Ceferino se convirtió en un dolor de cabeza. Las tareas de pavimentación de esa cuadra comenzaron en febrero de 2014 y aun la calle permanece cortada. El mayor problema radica en que no tienen lugar para estacionar.

Victoria Rasgido reside en Wilde 2.285 y es una de las habitantes más perjudicadas de la cuadra debido a que posee una fábrica de sandwich y los proveedores a duras penas ingresan con sus camionetas.

“Hace once meses que está la calle cortada y todavía no tenemos ninguna solución. Vino la Cooperativa; hizo el trabajo que le correspondía teóricamente y con esa esperanza pensamos que venía Camuzzi también, y no vino”, cuestionó la mujer.

Hace muchos meses que los operarios de la Municipalidad de Comodoro Rivadavia efectuaron tareas con maquinarias para reducir la altura del terreno y “dos veces rompieron cañerías”, apuntó otra vecina, quien se identificó como “Eli”. Después cortaron el acceso por calle Malvinas donde aún permanece un enorme montículo de tierra. Sin embargo, los habitantes se las ingenian para ingresar con sus vehículos por las veredas.

La comerciante indicó que “el municipio no nos informó en ningún momento que la calle la iban a abrir o no. Llamé a Comodoro Limpia y les pedí por favor que pasaran la máquina y no vino”.

Durante la intensa llovizna del 31 de diciembre muchos automovilistas quedaron atorados y “no podíamos salir porque la tierra estaba blanda. Todo esto es un problema y los vecinos no nos podemos desenvolver; se molestan unos a otros porque no tienen lugar para estacionar los autos”.

Por su parte Carmen González, quien se moviliza con un bastón, se quejó de que “yo tengo una chica que igual es discapacitada y no puede salir con el coche. Cuando llueve esto se desmorona todo y no se puede salir afuera. Promesa, promesa y promesa y no pasa nada”.

Finalmente, Rasgido pidió que “nos den una respuesta: si nos van a abrir la calle o la tenemos que abrir nosotros”.

Fuente:

Notas Relacionadas

Dejá tu comentario

Las Más Leídas del Patagónico