En el marco de la audiencia de revisión de la prisión preventiva que se llevó a cabo contra Misael Henríquez, se resolvió ayer el mantenimiento de la medida que viene cumpliendo y se fijó como nueva revisión el 10 de marzo.
El acto fue presidido por la juez penal Raquel Tassello, mientras que la Fiscalía estuvo representada por la funcionaria Verona Dagotto y el imputado recibió la asistencia de la Defensa Pública.
Tal como lo informó oportunamente Diario Patagónico, el 4 de diciembre Henríquez y su consorte Rodrigo Gallardo fueron sometidos a la audiencia preliminar donde se elevó a juicio oral y público la causa que los tiene como acusados por homicidio agravado por el uso de arma de fugo en calidad de autor y de partícipe secundario, de manera respectiva, y que tuvo como víctima a Carlos Muñoz Villagra.
En esa oportunidad el defensor particular que asiste a Gallardo, el abogado Daniel López, logró mejorar la situación procesal y la juez natural hizo lugar a la modificación del arresto domiciliario con salidas laborales por la libertad de este. No conforme con ello la Fiscalía pidió la revisión y un tribunal que integraron los jueces Miguel Angel Caviglia y Gladys Olavarría, confirmaron tal beneficio.
De todas maneras la situación de Henríquez no cambió porque venía imputado también en la causa del homicidio de Néstor Vázquez, la cual parece haber perdido convicción suficiente a partir de la declaración que el martes ofreció como adelanto jurisdiccional la testigo presencial del hecho.
No obstante ayer, la juez Tassello hizo lugar al pedido de la Fiscalía y mantuvo la prisión preventiva hasta el 10 de marzo, mientras aguarda que se lleve a cabo el juicio en su contra.
NUEVE DISPAROS
Hay que recordar que el crimen ocurrió durante la noche del sábado 28 de junio y según la parte acusadora, Carlos Muñoz Villagra (17) caminaba junto a dos amigos sobre la calle Federicci al 1.700. Antes habían pasado por un multirrubro 24 horas y cuando atravesaron el barrio Quirno Costa fueron perseguidos por los homicidas que comenzaron a disparar.
Al menos doce tiros escucharon los vecinos de la cuadra, de los cuales nueve alcanzaron el cuerpo de Muñoz Villagra. Uno de esos disparos rozó la pierna derecha de uno de sus acompañantes, mientras el tercero salió ileso de la agresión armada. En tanto que la víctima cayó en medio de un charco de sangre, antes de atravesar el bulevar donde funciona la feria “La Saladita”.