Caleta Olivia (agencia)
El edificio está ubicado en un predio que ocupa la mitad de una manzana del barrio Unión y luego de una meticulosa revisión, los servidores públicos y el matriculado no hallaron ninguna fuga.
El rector del instituto privado, de apellido Pérez, dijo a El Patagónico que se había llegado a la conclusión de que todo se debió a una “avivada” de un alumno para evitar que se tomara un examen regular.
El mismo habría enviado un mensaje a su padre por telefonía celular diciéndole que se sentía olor a gas y éste llamó a los bomberos, por lo cual los propios directivos se vieron sorprendidos ante la llegada de los servidores públicos.
De todos modos se activó un protocolo de emergencia y se evacuaron dos aulas al tiempo que se llamaba a los padres para que retiraran a sus hijos.
Por su parte el gasista matriculado comentó a este medio que él inspeccionaba diariamente las instalaciones y que esta vez sólo constató que manos anónimas habían retirado el “sombrero” de uno de los calefactores que da a la calle, pero ello no era motivo de alguna mala combustión del fluido.