Los hechos se registraron el sábado pasado, cuando una menor de 16 años era esperada por sus padres en la planta baja de un edificio ubicado en Superí y Olazábal del mencionado barrio porteño.
En esa circunstancia, la chica abrió la puerta del ascensor, que tiene puertas tipo tijera, y cayó al vacío, impactando su cuerpo contra el techo del elevador.
La policía, al llegar al lugar, encontró el cuerpo de la adolescente en el techo del ascensor, y se constató que murió en el acto por el fuerte impacto recibido.
Si bien los investigadores policiales consideran que se trató de un hecho accidental, el caso se está investigando como "muerte dudosa".
Los peritos policiales comprobaron que la puerta del ascensor estaba abierta en el piso noveno, altura desde donde cayó la menor.
Como todavía resta finalizar algunas pericias, los ascensores de este consorcio están de momento sin funcionar y con la faja de clausura.