Luego de accionar la válvula de paso de agua dejando inaugurado el nuevo acueducto de 53 kilómetros de longitud, el presidente Néstor Kirchner y el gobernador Mario Das Neves hablaron ante más de 4.000 personas reunidas en el gimnasio municipal 1 de Puerto Madryn, al que asistieron además senadores y diputados nacionales; el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido; el titular de la SIDE, Héctor Icazuriaga; el secretario de Obras Públicas, José López; y el presidente del Enhosa, Edgardo Bortolozzi.
"CUMPLIR CON LA
PALABRA EMPEÑADA"
"Pueblo querido de Chubut y Puerto Madryn», comenzó diciendo el Presidente en su discurso en el que una vez más consideró como «un querido amigo» al gobernador Das Neves, y como «casi mi casa» a Chubut.
"Les puedo asegurar que para alguien que le toca tener la responsabilidad que me toca tener a mí en este tiempo de la historia, no hay nada mejor que cumplir con la palabra empeñada. Y en este amado Puerto Madryn, en el que tantas veces estuve como turista, como vecino, como compañero, como hombre de la Patagonia, les digo: hemos cumplido con la palabra empeñada, inauguramos el acueducto tal cual lo dijimos hace un año atrás», enfatizó.
"Como dijo Mario (Das Neves): siguen las inversiones en todo el Chubut sin mirar el color político de quien conduce cada intendencia», dijo.
Afirmó luego que «soy argentino a fondo, pero soy patagónico de pura raza», previo a recordar que «nos querían condenar a ser el patio trasero de la Argentina», comparando lo que sucedía en la Patagonia con lo que pasaba en el norte argentino durante gobiernos anteriores.
"EMPRESARIOS
COMPROMETIDOS"
En ese marco afirmó que «no queremos más gerentes de representantes de otros intereses, queremos empresarios comprometidos con la patria, con el pueblo, con la Argentina; empresarios que trabajen junto a nosotros como están apareciendo ahora en este país. Estoy haciendo todo lo que puedo, los mismos que ayer fundieron y quebraron la Argentina hoy nos piden que solucionemos en apenas cuatro años lo que ellos destruyeron en 50. Y nos enseñaron que ser vivo, que ser buen dirigente era ser alcahuete de los intereses multinacionales e internacionales y no defender los intereses de la patria. El dirigente más inteligente, el que culturalmente está más preparado es aquel que se arrodilla y se inclina ante los intereses que no tienen nada que ver con la Argentina. Conmigo que no lo esperen nunca, siempre de pie, como dijo Yrigoyen: ‘que se rompa pero que no se doble’», afirmó.
En ese marco reconoció que «claro que quisiéramos ir más rápido, pero vamos todo lo más rápido que podemos, por eso le digo al pueblo de Chubut y al pueblo de Puerto Madryn, por favor ayúdenme porque si el pueblo me ayuda, si el pueblo me empuja, si el pueblo me cuida, si el pueblo me acompaña, no tengo ninguna duda de que esta Argentina va a salir adelante».
"ME SIENTO
EN CASA"
«Estoy emocionado y estoy feliz en Puerto Madryn, me siento en mi casa, sé que es mi casa también. Estoy emocionado en el Chubut, estoy contento con todos los argentinos y argentinas de toda la patria, peleando por un país distinto», agregó luego el Presidente.
En la parte final de su discurso, Kirchner instó a los argentinos a «seguir luchando, a seguir trabajando, a sentir con emoción las cosas que hacemos. A besar con cariño y con una pasión tremenda esta tierra patagónica, esta tierra que le va a dar y le ha dado tanto al país. A querer toda la Argentina, a luchar por los ideales, a luchar por las convicciones, a luchar por nuestros viejos que los vamos recuperando de a poco, a luchar por nuestros estudiantes, por nuestros intelectuales, por todos nuestros trabajadores y empresarios nacionales; a luchar por todos los que vienen a habitar esta tierra argentina, a luchar por todos los hermanos de la patria, a luchar por el amor, por la pasión, por solidaridad, por la pluralidad. A tomarnos de la mano y cantar con fuerza por un nuevo amanecer.
A dar 10, 20, 30 pasos adelante en la búsqueda del país que nos merecemos. A soñar nuevamente que la justicia es posible, a soñar que salimos del infierno, a soñar que recuperamos la sonrisa, a soñar que nuestros hijos van a estar mejor que nosotros, a soñar por una patria mejor. Viva Chubut, viva Madryn, viva la Patria», concluyó.