La ciudad donde Argentina iniciará su participación en el Mundial

La esplendorosa Río de Janeiro será la sede del primer partido de la selección frente a Bosnia el domingo a las 19. Allí el turista puede visitar el Cristo Redentor, las playas de Copacabana e Ipanema, además del cerro Pan de Azúcar y su majestuosa vista, y el Parque Nacional Tijuca donde se encuentra la más famosa estatua de Jesucristo.

 La ciudad más festiva de Brasil, donde cada año se vive a pleno el carnaval en el turístico sambódromo, ya tiene todo listo para su mayor fiesta de los últimas décadas. Desde el jueves el país será anfitrión del Mundial de Fútbol 2014 que tendrá grandes protagonistas, entre ellos Argentina, Brasil, Italia, España y Alemania como principales candidatos a llevarse la copa.
Miles de personas llegarán de todo el mundo para estar presentes en las diferentes sedes donde jueguen sus selecciones: Bello Horizonte, Brasilia, Cuiaba, Curitiba, Fortaleza, Manaus, Natal, Porto Alegre, Recife, Salvador, Sao Paulo, y la majestuosa Río de Janeiro.
En esta última ciudad, el seleccionado argentino abrirá su participación en el Mundial. Será el domingo frente a Bosnia, a partir de las 19. Allí se harán presentes miles de argentinos de diferentes provincias, entre ellas Chubut, y ciudades como Comodoro Rivadavia.
El objetivo principal es acompañar a la selección, buscando el sueño dorado, sin embargo, el mundial es turismo, por esta razón los comodorenses que lleguen a estas latitudes tendrán una buena oportunidad para conocer una de las ciudades más hermosas de Brasil.
Por la época del año no será posible disfrutar del calor sofocante del verano, sin embargo, las buenas temperaturas que superan los 25 grados permitirán que el turista pueda disfrutar de la costa de Copacabana e Ipanema, las dos playas más populares que son una tentación para los amantes de las olas y los deportes de playas.
Las costas tienen sus características. Ambas están bordeadas por transitadas calles donde se da continuidad al ritmo de vida de la urbe. En ellas se pueden encontrar paradores para descansar, tomar agua de coco, una cerveza o porque no una caipiriña, bebida típica de este país. Durante su extensión se encuentran duchas, baños, castillos realizados por escultores de la arena, y estatuas que recuerdan alguna figura emblemática del país.

EL REDENTOR
Por supuesto, si las condiciones del clima no lo permiten, el turista puede cambiar de rumbo y elegir entre varias opciones que ofrece Río. La más conocida es la visita a la estatua del Cristo Redentor en el cerro Corcovado, donde se encuentra el Parque Nacional Tijuca.
Para llegar allí las opciones más frecuentes son el subte y el colectivo; uno aporta la tranquilidad de llegar a destino con solo mirar un cartel y el otro la posibilidad de ir conociendo los barrios de la ciudad, en un viaje de una hora aproximadamente dependiendo de donde se encuentre el turista. También es un poco más barato.
Al llegar a la base del cerro, el visitante podrá ascender al mismo en el Ferrocarril del Corcovado, inaugurado en 1984 por el emperador Pedro II de Brasil; o algunas de las camionetas de operadores turísticos que ofrecen la excursión sin pérdida de tiempo y tickets instantáneos.
La visita será fácil ya que los mismos operadores se acercan al turista y explican las opciones. Sin embargo, esta vez por la cantidad de gente habrá que tener paciencia, además de estar prevenidos de posibles oportunistas.
Una vez en el ingreso el visitante no tiene que hacer frente a los 220 escalones que conducen a los pies de la estatua, ya que el acceso fue mecanizado con ascensores panorámicos y escaleras mecánicas.
El Cristo es considerado la estatua Art decó más grande en el mundo, tiene una altura de 38 metros, más una base de 8 metros. La misma esta a 710 metros sobre el nivel del mar y fue inaugurada el 12 de octubre de 1931, después de más de cinco años de obras.
La misma fue proyectada por el delegado Héctor da Silva Costa y realizada por el escultor francés Paul Landowski. Su imagen es una postal que recorre el mundo, por esta razón es imposible dejar de visitarla.

MUCHO MAS POR CONOCER
Viajar a Río de Janeiro desde Comodoro Rivadavia ronda los 8 mil pesos, de ida. La ciudad es una de las sedes más atractivas de todo el mundial, ya que allí, en el histórico Estadio Macaraná, donde Pelé convirtió su gol número 1.000 y donde Zico despuntó redes como en un ningún otro templo, se jugará la deseada final.
Pero más allá del fútbol, allí el turista encontrará una buena oferta hotelera y gastronómica, también diversión nocturna, y otras excursiones y tentaciones para conocer por su importancia histórica o su atractivo.
Entre ellas la Catedral Metropolitana de San Sebastián, dedicada a la patrona de la Arquidiócesis de Río de Janeiro, que se encuentra en el centro de la ciudad. A su fachada majestuosa se suma la “Puerta de la Fe”, un pórtico de cobre martillado que consta de 12 placas verticales, pesa unas ocho toneladas y mide 18 metros de largo y 5,65 metros de altura.
Otra alternativa más natural es el Jardín Botánico que en el lado sur de la ciudad, ofrece una visita a miles de especies de flora, algunas en peligro de extinción. Son 54 hectáreas de casas de monumentos históricos, con una amplia programación cultural, además de cursos de jardinería, paisajismo, fotografía y observación de aves, ofrecidos por la Asociación de Amigos del Jardín.
Al caer la tarde, el recorrido puede continuar en Santa Teresa, un barrio lleno de ocio y cultura, bien bohemio, con un aire similar a San Telmo en Buenos Aires. Allí viven estudiantes, se encuentran hostel y hay una excelente movida nocturna que combina pub y discos, con todos los ritmos, desde reggae a zamba tocada en vivo por antiguas bandas que le ponen todo el color a la noche de Río de Janeiro, ciudad del carnaval, el fútbol, y el arte.

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