Caleta Olivia (agencia)
Una numerosa cantidad de banderas del Estado Plurinacional de Bolivia y la que representa a los pueblos originarios de América, además de numerosas pancartas y cánticos avalando a quien consideran como el legítimo presidente que se vio obligado a dimitir, caracterizaron la movilización que también contó con el apoyo de organizaciones sociales locales y del Partido Obrero.
Los colores amarillo, rojo y verde que conforman el símbolo patrio del país que tiene 36 etnias autóctonas, también se desprendieron de tres artefactos de humo que se activaron en la plazoleta del Monumento al Obrero Petrolero, donde se produjo la concentración final e incluso se observaron algunas banderas argentinas.
Los rostros de los manifestantes evidenciaban gestos de indignación por los graves sucesos institucionales que repercutieron en todo el mundo y en ese contexto vale señalar que la colectividad boliviana tiene una gran inserción en Caleta Olivia, ya que se estima que sus integrantes son aproximadamente 8.000.
Al tradicional cántico que caracteriza las manifestaciones populares por el cual se resalta que “el pueblo unido jamás será vencido”, se le sumó otro que tuvo directa relación con los recientes acontecimientos, cuando los manifestantes vociferaban que “racistas y golpistas no pasarán”.
Lejos de su Patria, pero llevándola en sus corazones, los residentes que en muchos casos ya adoptaron la ciudadanía argentina, protagonizaron una manifestación similar a la que habían realizado horas antes sus connacionales que residen en Comodoro Rivadavia.
Precisamente de esa ciudad arribó el agente consular Daniel Gil Quintanilla, quien fue uno de los principales oradores e incluso encabezó la marcha por las calles céntricas cuando ya promediaba la tarde del lunes.
LA ARENGA
Antes, en el playón deportivo del barrio 3 de Febrero donde se levantan casas que van trepando por una pronunciada pendiente de un cerro, el agente consular que consideraba tener aún los fueros de tal investidura, tomó un megáfono para dirigirse a sus paisanos.
En principio les agradeció el firme apoyo que brindaban a Evo Morales, que en esos momentos esperaba abordar un avión para exiliarse en México.
Les recordó parte de las acciones que hizo el líder latinoamericano para disminuir la desigualdad social y potenciar la economía de su país ya que anteriores gobiernos motivaron que hubiera millones de pobres que se vieron obligados a irse al extranjero y muchos de ellos recalaron en ciudades argentinas, como era el caso de Caleta Olivia.
“Hermanos, ahora que nuestro presidente está en problemas nosotros tenemos la responsabilidad de estar a su lado porque fue el único que nos ha devuelto la dignidad” afirmó.
“Bolivia, antes de Evo, era un país olvidado que no tenía futuro y es por eso que ustedes están aquí (en Caleta) porque años atrás han sido prácticamente expulsados ya que no podían progresar en sus vidas, pero nuestro presidente cambió todo con sus políticas públicas y por eso lo menos que podemos hacer es acompañarlo en estos momentos difíciles”, puntualizó.