El Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, ratificó ayer que “las paritarias en la República Argentina son libres”, y que los niveles salariales que se logren en ese ámbito entre empresarios y trabajadores “dependerán de la capacidad y disponibilidad de cada sector”.
“Las paritarias son de libre negociación entre las partes, y por lo tanto, si empresarios y trabajadores para un determinado tipo de sindicato, se ponen de acuerdo para la modalidad de remuneración, el gobierno no tiene intervención directa en la materia”, dijo el Jefe de Gabinete.
Consultado acerca de si el gobierno apunta a que se fije una pauta general para los niveles salariales futuros, señaló que “nosotros creemos que la meta hacia adelante debería tener razonabilidad desde el punto de vista de la capacidad de cumplimiento y de la preservación del poder adquisitivo del salario”.
Ante los anuncios de eventuales medidas de fuerza por parte de algunos sindicatos, Capitanich señaló que “nosotros somos absolutamente respetuosos del derecho de huelga”, pero destacó que “es necesario tener razonabilidad desde el punto de vista de los planteos y los reclamos”.
En cuanto al anuncio del Sindicato de Camioneros de realizar un paro en reclamo de un bono para fin de año, enfatizó que “no es una cuestión que competa o sea de incumbencia del Estado”, y que el tema “deberá resolverlo el Sindicato de Camioneros con sus empleadores”.
Consideró luego que “es muy difícil dar una respuesta homogénea” para todos los niveles salariales de los diferentes sectores, “porque esto depende mucho de cada actividad”.
Tras afirmar que “en los últimos 10 años ha habido recuperación del poder adquisitivo de los salarios”, apuntó que “el problema central a resolver es el de los trabajadores informales, es decir, los que no están encuadrados legalmente”.
Para combatir ese flagelo del trabajo no registrado, Capitanich puntualizó que “nuestros incentivos tienen que ver con el empleo joven, estrategias de corresponsabilidad para inclusión social y laboral y mecanismos que nos permitan corregir también las asimetrías existentes entre el empleo informal y el formal”.
“Si uno toma los últimos 10 años en la Argentina ha habido expansión del empleo, con 6.000.000 de nuevos puestos de trabajo, y hoy tenemos cerca de 17 millones de personas empleadas: eso significa que nuestra política laboral tiene que tender a seguir incentivando la creación de empleos y la recuperación del poder adquisitivo del salario real”, sostuvo Capitanich.
Para el Jefe de Gabinete existe consenso sobre “la agenda que nosotros estamos proponiendo” que incluye “herramientas para fomentar y potenciar el empleo joven, estrategias de corresponsabilidad que permitan reducir la informalidad y para reducir el empleo informal”.
“Se trata de estrategias que, en definitiva, potencien la inclusión social y permitan mejorar la distribución del ingreso. Creo que en eso estamos todos de acuerdo y eso es lo que tenemos que hacer de aquí en más en los próximos dos años”.
- 17 diciembre 2013