Un nene de siete años estaba jugando a la pelota con unos amigos en la puerta de su casa el lunes por la tarde cuando en un descuido cayó en el patio del vecino.
El hombre mayor, molesto por la presencia de los chicos, sacó su arma y cuando vio al menor disparó al menos una vez.
El disparo alcanzó la mano derecha del niño, que salió corriendo y fue trasladado de urgencia al hospital más cercano.
A pesar de la gravedad del caso y que el hombre fue identificado, la Fiscalía no tomó ninguna determinación contra quien disparó y tampoco fue citado a declarar.