A contramano por San Martín, desde Moreno a España, y con una brisa refrescante desde el este, aparecieron los murgueros más pequeños pidiéndole pista a la gente que se juntó en los laterales para disfrutar de un espectáculo que divierte y contagia el cuerpo con sus ritmos.
De todos los tamaños y colores, bailarines y músicos llevaron al centro los sonidos que en sus barrios ensayaron para la fiesta en la que ayer fueron los protagonistas.
Los parches de los instrumentos de percusión soportaron la emoción de quienes los ejecutaban y sus desgarrados lamentos se mezclaron en aire, dándole sentido a los coordinados movimientos de la murga.
«Estamos disfrutando de un momento muy lindo, nos acompaña el clima y mucha gente con buen humor y buena onda. Los chicos, por supuesto, nos regalan todo el brillo con sus bailes», sostuvo el secretario de Cultura y Turismo, Mario Morón, quien compartió el palco ubicado en la plaza de la Escuela 83 con la concejal Judith Jozami.
El funcionario indicó que fueron 22 las murgas que se presentaron ayer y aseguró que «esto sigue creciendo».
«La verdad es que al carnaval si se le da apoyo se potencia solo y en los barrios la cantidad de personas que fueron aparenciendo con las murgas fue impresionante. Después se nos hace difícil responder a la expectativa porque nos cuesta mucho ayudarlos y darles fondos para la ropa y los instrumentos, aunque es algo a lo que no dejamos de darle el apoyo que necesitan», sostuvo.
APORTES
El aporte desde la Secretaría que conduce Morón se traduce también en la capacitación que fue ofreciéndole a las distintas murgas, como por ejemplo en materia musical y a través de cursos con percusionistas.
«Ojalá que esta fiesta se mantenga y cada verano es más grande. Sin dudas hay que apoyarlo porque el carnaval es una fiesta genuina, no es un invento de nadie, es algo que estaba dormido y que si se estimula, la gente se mueve y disfruta como está ocurriendo ahora», concluyó.
En un pequeño corte que se hizo después de que las primeras diez murgas pasaran frente al palco oficial, la atracción se dirigió al escenario, donde la banda de rock «La Cuarta» le puso sonido eléctrico a la tarde.
Las murgas que desfilaron fueron Color Esperanza (Laprida), Asociación Boliviana Tinkunaku (del San Cayetano), La Furiosa (Isidro Labrador), Pequeños Diamantes (Diadema), Comodoro Fashion (La Floresta), Yasiberá (Abel Amaya), Los Chicos Murgueros (Laprida), Los Amantes de la Boca (Presidente Ortíz), La Nueva (Quirno Costa), Los Fanáticos (Standard Centro), Comparsa Serpentina (Próspero Palazzo), Sol de Noche (Las Orquídeas), Amistad (Extensión del Máximo Abásolo), Soles y Lunas (Pietrobelli), La Fuerza (Máximo Abásolo), Poesía Murguera (Isidro Quiroga), Comparsa Yaraví (Kilómetro 8), Los Simpáticos Caraduras (Próspero Palazzo), Los Gigantes del San Martín (San Martín).
La tarde se hizo noche y los números artísticos continuaron con la Banda Juvenil Municipal y La Subasta, actuaciones que se intercalarían con la presentación de las candidatas a reina del carnaval.
Es que a diferencia de otros años, esta vez no se otorgará premio a las murgas, algo que según Morón fue una decisión que tomaron en conjunto los participantes, pero de todas formas el carnaval tendrá su soberana y para ello todos presentarían a su propia candidata.
Los que ayer no tuvieron la oportunidad de llegar al centro para ver el show deben saber que están a tiempo para hacerlo hoy porque a partir de las 17:30 las murgas volverán con todo su esplendor.