Cuando Natalia Barría tenía diez años se enteró que en el club de su barrio –Jorge Newbery- habían comenzado a dar clases de hóckey. La noticia le llegó porque Alejandro Molina (actual DT de Calafate RC) junto a Pablo Alarcón fueron a invitar a los chicos de la escuela primaria 26.
La propuesta perduró solo dos meses en el “lobo”, pero la pasión ya había quedado impregnada en el alma de Natalia.
Por ello, y por iniciativa propia, hace un año el club vuelve a contar con hóckey. Donde la mayoría de las chicas se acercó primero por el amor de los colores del club al cual van a alentar cada fin de semana.
El primer paso lo dio Natalia en marzo de 2014, antes de ello había participado como jugadora de Chenque Rugby Club y era una de las iniciadoras del juego en Huracán, pero discrepancias con la comisión directiva la llevó a alejarse. Luego el hóckey desapareció de la institución de barrio Industrial.
“Cuando me acerqué al club a presentar el proyecto, desde el primer momento Héctor Cárdenas –presidente de Jorge Newbery- estuvo predispuesto a comenzar con la actividad nueva en todo sentido para la institución. En un inicio pensamos que iba a ser medio complicado adaptar este deporte a un club netamente de futbol. Pero fue todo lo contrario, tuvimos desde el comienzo el apoyo de toda la gente desde la dirigencia (siempre abierta a nuevas propuestas) hasta la hinchada. Comenzamos con un grupo pequeño pero con el correr de los días terminamos con aproximadamente 50 jugadoras entre todas las categorías”, apunta Natalia a Diario Patagónico.
EL AMOR POR LOS COLORES DEL CLUB
De seis chicas en un principio, el grupo de hóckey –que inicia desde los cinco años- se fue nutriendo en primer lugar de mujeres que cada fin de semana alentaba al equipo de fútbol. Hoy el número ronda las 60 personas repartidas en diversas categorías.
“Lo que más destaco de este grupo es el compañerismo, todas las integrantes del club están predispuestas a que siguen sumando nuevas jugadoras, sin importar el barrio, el club nada, solo venir a disfrutar de este deporte. Sin duda ser hincha de este bello club es un plus muy importante para que la actividad continúe, porque da esas fuerzas para seguir realizando eventos, para recaudar fondos, y crecer a nivel local en el ambiente del hóckey”, recalca Barría.
A disposición, las chicas cuentan con todas las instalaciones y elementos que les brinda la institución, además de las que fueron consiguiendo por iniciativa propia.
“Uno hace esto por dos cosas principalmente. Primero por el amor al hóckey que me llevó a jugar en Newbery cuando tenía 10años, con el entrenador Alejandro Molina y su ayudante Pablo Alarcón. A pesar de que sólo duró dos meses, me sirvió para sumarme por seis años a Chenque RC donde Pablo era el DT. Por el estudio, estuve ausente un par de años hasta que volví en Huracán durante 1 año y medio, pero no nos pusimos de acuerdo con la dirigencia y su gente. Por eso decidí irme, y al tiempo no tuvieron más hóckey”, rememoró.
Desde entonces conforma el equipo del Club Náutico y Deportivo Rada Tilly, donde su entrenador Marcelo Guerreiro es quien la ayuda y asesora sobre este deporte: “él me dio una mano muy importante porque es uno de los mejores en la ciudad. Ya sea siendo campeón y subcampeón nacional de pista, y obteniendo la mayor premiación en sus categorías en cada torneo que se presenta. El año pasado fui su ayudante en los Juegos Evita siendo campeones en la instancia de provincial en categoría sub14 y 3° puesto en sub16 llegando en instancia nacional a representar a nuestra provincia”, elogio.
DEJAR DE LADO LA EXCLUSIVIDAD DEL DEPORTE
“El hockey es un deporte de elite, todos sus elementos son caros. Cuesta mucho mantener un deporte así, pero no es imposible si se tiene las ganas suficientes y el respaldo de un club tan Importante como lo es Jorge Newbery”, sentencia Natalia.
En la misma sintonía, Barría se siente orgullosa de contar con un grupo de mujeres que cuentan con una mentalidad abierta y sin prejuicios de nada, que vienen con compromiso y pasión a divertirse y practicar un deporte sanamente, sin importar la edad.
“La mayoría de las chicas comenzó de cero sin saber nada y hoy en día le pueden hacer frente a cualquier equipo. Además el respeto y amor por estos colores es la base del club y eso les trasmitimos a todos los que lo conformamos”, reafirmó.
En personas destacadas, Natalia nombra a “Héctor Cárdenas y su comisión, a Luisa que siempre nos da una mano, a José (el canchero) que está disponible para que entrenemos en cualquier horario abriéndonos las puertas del club, a la gente de la hinchada, a todas las jugadoras desde la más chiquita a la más grande, a mi entrenador que me banca en todas las ideas y por supuesto a mi familia que me apoyan con esta locura”, sentenció.
Afuera las chicas entrenan para su primer torneo de hóckey sobre césped que realizarán el 14 y 15 de marzo, donde las “lobas” exhibirán con orgullo la indumentaria oficial del conjunto “aeronauta”.
Horarios
- 5 a 7 años: jueves de 17:30 a 18:30. Sábados 10:30 a 11:30.
- 8 a 12 años: lunes de 17:30 a 19 hs. Sábados 11:30 a 13:00.
- 13 años en adelante (sin límite de edad): martes y viernes de 20 a 21. Sábados de 13 a 15.
- Entrenamientos físicos: lunes de 20 a 21.30. Miércoles de 20:30 a 22.
- Consultas en secretaria del club de lunes a viernes de 18 a 20.
- Comienzo de actividades lunes 16 de marzo.