Piden condena ejemplar para el causante de trágico choque ocurrido cerca de Jaramillo
El caso es juzgado bajo la carátula de "homicidio culposo agravado" y tanto el abogado querellante como el fiscal pidieron cuatro años de prisión efectiva para el acusado, mientras que el defensor solicitó la absolución y subsidiariamente una pena mínima.

Caleta Olivia (agencia)

Ana María Marcos, quien fuera esposa del empleado de aduanas Ricardo Silvi, fallecido el 14 de abril de 2013 cuando una camioneta chocó una Trafic en la que viajaba acompañando a una delegación de chicos de Puerto Deseado, pidió a los jueces que juzgan al conductor del vehículo menor imputado en la causa que ahora se ventila en juicio oral y público que “interpreten el Código Penal a favor de las víctimas”.

Lo dijo a media mañana de ayer, poco antes de que comenzara la audiencia de alegatos en la Cámara de Crimen de Caleta Olivia y se espera que la semana próxima el tribunal conformado por los jueces Juan Pablo Olivera, Humberto Monelos y Jorge Alonso den a conocer la sentencia que le corresponde al chofer Carlos Alberto Sandoval, la cual se dará a conocer el 1° de octubre.

El caso fue elevado a juicio como “homicidio culposo agravado” y tanto el abogado querellante, Heraldo Nanni, como el fiscal Carlos Rearte pidieron cuatro años de prisión efectiva, mientras que el abogo defensor, Carlos Toledo Vargas, solicitó la absolución y subsidiariamente una pena mínima.

Vale recordar que el choque se produjo en la Ruta Nacional 281 en cercanías de la localidad de Jaramillo cuando el micro con la delegación de niños basquetbolistas de Deseado se dirigía hacia el norte del país para participar de un certamen y la camioneta que venía de frente se cruzó de carril y chocó al micro.

Además de producirse el deceso de Ricardo Silvi, hubo numerosos heridos y varios de ellos aún padecen serias secuelas, como el caso de un joven que aún se encuentra convaleciente.

Sandoval alegó en la primera jornada del juicio que se distrajo cuando se agachó para recoger un disco compacto, en tanto que al practicársele un dosaje sanguíneo se comprobó que tenía 0,8 de alcohol, pero las familias de las victimas cuestionaron el examen porque dicen que se lo hicieron cuatro horas después de ocurrida la tragedia.

Por otra parte, Ana María Marcos recordó que en la Trafic también viajaba su hijo (que hoy tiene 19 años) el cual sufrió serios traumas psicológicos a tal punto que cuando tenía 15 años le dijo que no quería vivir más porque no podía soportar el dolor de perder a su padre y él se sentía culpable de pedirle que lo acompañara en ese viaje. Es por ello que pedía “una condena efectiva y ejemplar para que este tipo de hechos protagonizados por irresponsables al volante no ocurran nunca más”.

SOLIDARIDAD

En la rueda de prensa, también estuvieron presentes otras personas que representan a las ONG’s Estrellas Amarrillas y Madres del Dolor, que se solidarizaron con Ana María.

Una de ellas, Soraya Warner, comentó: “soy de Rio Gallegos y a mi hijo lo mataron en un siniestro vial el 16 de junio del 2015 y cuando ello sucedió busqué apoyo en Madres del Dolor de Buenos Aires”.

Por su parte, María Sanz, de Estrellas Amarillas, dijo que “hemos venido a acompañar a Ana en la lectura final de los alegatos, en este pedido incansable de justicia que lleva adelante toda la familia y le den la paz y tranquilidad para cerrar esta etapa”. “En todos lados siempre hay casos, mi hijo falleció en un hecho en el cual hubo alcohol y se corrían picadas en pleno centro de la ciudad de Rio Gallegos”, agregó.