Más de un centenar de vecinos asistieron ayer a la reunión en la sede vecinal del barrio Ceferino Namuncurá, marco en el cual se hizo una evaluación de lo realizado hasta el momento por la comisión que preside Rafael Pérez, quien el 5 de mayo cumplió los cien días de gestión al frente de la institución.
En ese contexto, y tal como lo había anticipado este diario, se evaluó la posibilidad de efectuar un corte de avenidas para que los problemas del sector fueran atendidos por funcionarios municipales y provinciales, y no tan sólo escuchados como ha ocurrido hasta ahora.
Los pedidos principales son la reparación de la sede vecinal cuyo techo está repleto de averías motivo por el cual el lugar se inunda cuando llueve; y calefacción. También se sumó el pedido del servicio de gas para las familias que no lo tienen y cordones cuneta, pavimento, la nivelación y arreglos de calles que están en malas condiciones, entre otros reclamos.
A esos se sumaron casos puntuales como la apertura de una salida para el pasaje Millapi y la solución para un vecino que tiene su vivienda casi en medio de calle Wilde y obstruye el paso vehícular.
OTRA OPORTUNIDAD
«Por ahora, el corte de las avenidas queda en suspenso, pero que sepan las autoridades que vamos a hacer todo lo necesario para que se hagan cosas, no solamente para la vecinal sino para todo el barrio», dijo ayer el vecinalista Rafael Pérez, quien opinó que «este es un barrio olvidado. Los políticos nos dicen, cien días es muy poco, pero a eso nosotros respondemos que ellos hace cuatro años que están y no han hecho nada por nosotros».
Como el vecinalista anunció al culminar la semana pasada que había un gran descontento y que eso podía llevar al corte de calles, surgieron algunas ofertas de mesas y sillas como también de un subsidio en las últimas horas, aunque los integrantes de la comisión querían esperar a que estos donativos se confirmaran.
«Yo quería el corte de calle, pero como no depende de mi, me pidieron cordura y que le de una oportunidad al municipio, para que nos de lo que por ley nos corresponde», manifestó Pérez.
Hasta ahora, las versiones de lo que se recibiría desde la coordinación de asociaciones vecinales y de la Secretaría de Desarrollo Humano y Comunitario hablaban de 70 sillas, 15 mesas, calefacción y hasta de un subsidio de 200 mil pesos.
«Estamos cansados de todo esto por eso hasta que no veamos todo, no creemos nada», consideró finalmente Pérez.