En la calle pasaje Gil Álvarez y 25 de Mayo se encuentra un lote que antiguamente se utilizaba como estacionamiento y hoy en día está cerrado con un cerco de chapa y pilotes de cemento.
Debido a las ráfagas del último fin de semana, dicho cerco perimetral ha cedido y se encuentra al borde del derrumbe, lo que preocupa a transeúntes y puesteros del lugar ya que es un peligro para todos.
En dicha esquina también se encuentra una garita de colectivos donde numerosos pasajeros esperan para poder ir a zona norte.