Se abrió piquete en la ruta 12 ante la intervención del ministro Neyro

Pasadas las 16 de ayer, los manifestantes despejaron la ruta cortada que comunica a Caleta Olivia con los yacimientos del norte santacruceño, luego de que el ministro de Gobierno, Gustavo Neyro, se comunicara telefónicamente con ellos para ofrecerles un cronograma de reuniones.

Caleta Olivia (Agencia)
Como una medida de «buena voluntad» para resolver el conflicto, el grupo de desocupados que desde comienzos de la semana instauró un piquete en las rutas 12 y 3, en los ingresos a esta ciudad, decidió hacerse a un costado y «aguardar respuestas» desde el Gobierno provincial y el municipio.
Esta determinación fue tomada luego del llamado telefónico que ayer al mediodía le hizo el propio ministro de Gobierno de Santa Cruz, el caletense Gustavo Neyro, a una de las voceras de las dos agrupaciones manifestantes, Norma Villamayor.
En esa comunicación, el ministro se habría comprometido a buscarles una solución a los desocupados y, para ello, constituirá como intermediaria a la sede zonal de la Subsecretaría de Trabajo.
Paralelamente, funcionarios comunales también abrieron otra puerta al diálogo en un encuentro que ayer tuvieron en la ruta cortada cerca de las 13.
Allí, la concejal a cargo del Ejecutivo, Lucila Rementería, y el secretario de Gobierno, Carlos Martínez, les propusieron una primera reunión en el edificio municipal, que se concretaba hasta el cierre de esta edición.
Al parecer, las palabras de Neyro fueron convincentes para los piqueteros ya que aceptaron despejar la carretera «por el momento», según dijeron.
Esta es una reacción que contrasta con la del miércoles a la tarde, cuando les llegó la «orden de desalojo» de ruta, remitida por el Juzgado de Instrucción 1 local. En ese momento, hicieron caso omiso a la orden y hasta se estaban preparando para situaciones más conflictivas con fuerzas de seguridad.

QUIEREN MESA
Con este acercamiento de los gobernantes, los desocupados quieren que se arme una «mesa de negociación» integrada por ellos, el municipio, las operadoras petroleras, empresas constructoras y la Provincia para que surja «alguna propuesta laboral concreta, bajo convenio».
Según Villamayor, «Neyro se comprometió, en principio a no reprimirnos si permanecíamos en la ruta y también a que buscaría la solución; entonces, como medida de buena voluntad decidimos despejar las rutas y esperar propuestas».
Por ello, pasadas las 16, se descomprimió el enclave, cuando los manifestantes quitaron gomas quemadas de la ruta 12 y dejaron que los camiones y camionetas de empresas petroleras pudieran circular.
Cabe acotar que el miércoles ya dejaban pasar a automovilistas y camiones particulares que no tenían que ver con la actividad hidrocarburífera. 
Los reclamantes anticiparon ayer que las negociaciones podrían llevar dos semanas o más, de acuerdo a lo que respondan las operadoras o el gobierno, y repitieron que no aceptarán «otra cosa que no sea trabajo bajo convenio». Villamayor aclaró: «no vamos a aceptar ni bolsones, ni vales, ni microemprendimientos, ni ingresar a cooperativas, queremos trabajo genuino».

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