Con la situación humanitaria en Homs seriamente deteriorada luego de un sitio de varias semanas que dejó cientos de muertos, ayer se multiplicaron los llamados internacionales a declarar un alto el fuego que permita hacer llegar asistencia a las zonas más afectadas por los combates entre el Ejército y opositores armados.
Rusia y China, sin embargo, volvieron a rechazar cualquier interferencia extranjera en Siria, en medio de una creciente actividad diplomática de países occidentales y árabes para forzar la renuncia del presidente Bashar Al Assad, al que consideran responsable de la crisis.
Un día después de la muerte de dos periodistas occidentales, activistas opositores denunciaron que entre 16 y 40 personas murieron ayer en distintas ofensivas de las fuerzas de seguridad sirias en zonas opositoras como en la central provincia de Hama o la región de Jabal al Zawiya, en el norte.
También ayer, un equipo de investigadores de la ONU acusó al gobierno de Al Assad de crímenes contra la humanidad en su represión de la revuelta, que según Naciones Unidas ya dejó más de 5.400 muertos.
El informe se conoció un día antes de que unos 70 países occidentales y árabes se reúnan en Túnez para discutir la crisis en Siria.
Fuentes diplomáticas citadas por la cadena BBC dijeron que el encuentro llamará a Al Assad a implementar un inmediato cese el fuego para permitir el acceso a Homs y otras zonas asoladas por la violencia, donde ya escasean los medicamentos y la comida.
Los llamados “Amigos de Siria” planean reconocer también al Consejo Nacional Sirio, el principal grupo opositor a Al Assad, como el “representante legítimo de los sirios que buscan un cambio democrático pacíficamente”, dijeron las fuentes.
Esta frase parece reflejar reparos sobre un reconocimiento más pleno de este grupo que representa a la oposición siria, que está formada por soldados desertores, civiles que tomaron las armas y también por islamistas radicales que simpatizan con Al Qaeda, que este mes pidió el derrocamiento del gobierno secular sirio.
La ciudad central de Homs, uno de los epicentros de las protestas opositoras, se encuentra bajo asedio desde hace 20 días.
- 24 febrero 2012