Tal como informó en exclusiva Diario Patagónico durante la primera semana de febrero, la nueva ocupación ilegal que se registró en el cerro lindante a las 1008 viviendas provocó reacciones en la corporación municipal.
En ese contexto, ayer un grupo de ex ilegales que en su momento ocuparon terrenos municipales y con el paso de los meses lograron poner en marcha sus expedientes se acercaron al edificio comunal para plantear la necesidad de agilizar sus trámites, sobre todo por los requisitos se piden la Sociedad Cooperativa y Camuzzi Gas del Sur.
Sobre la problemática el intendente aclaró que «nosotros como Estado vamos a analizar algunas cuestiones puntuales pero, en general, no avalaremos ningún tipo de ilegalidad. Queremos que la energía llegue a esos lugares por los canales correspondientes y lo único que proponemos es dialogar con aquellos que han asurpado para que retomen una actitud dentro de la legalidad».
«Bajo ningún punto de vista nosotros desde el municipio vamos a legalizar una ocupación no autorizada porque de lo contrario no sólo estaríamos cometiendo una falta sino que además se estaría discriminando a aquellos que están haciendo todos los trámites correspondientes y aún están esperando su terreno», agregó.
El jefe comunal indicó que «sabemos que hay ocupantes ilegales que mienten a la hora de exponer su situación económica y luego, con el avance de los trámites, se dedican a vender los terrenos o directamente los expedientes. Existe un mecanismo normal de entrega de lotes y si bien puede haber retrasos se está trabajando mucho en ese sentido».
Sobre la posibilidad de tráfico de influencias en el propio municipio, tal fue el caso de la denuncia que radicó la secretaria del área Josefina Bidondo cuando se detectó una maniobra ilegal por parte de una empleada de Tierras, el intendente ratificó que «todos aquellos incidentes que nos encontremos por afuera de lo permitido serán denunciados».
En cuanto a las acotaciones de uno de sus secretarios quien sugirió la idea de «pasar la topadora» en los asentamientos ilegales, el intendente agregó que «un terreno que es de todos no puede ser tomado por asalto por parte de un solo vecino. No puede haber privilegios ya que hay alrededor de 4.000 interesados en obtener un lote».
«Cada vez que haya una ocupación ilegal, nosotros vamos a radicar una denuncia y si es necesario llevaremos las máquinas como ya lo hemos hecho en otras oportunidades. Obvio que el deseo es que nadie salga herido pero no se puede convalidar la ilegalidad», dijo.
Por último, el intendente sostuvo que «en la mayoría de los casos se trata de personas que toman los lotes por asalto y después empiezan a pedir el agua, la luz, el gas y no podemos tolerarlo».
- 15 marzo 2007