Caleta Olivia (agencia)
Alrededor de las 9:30, una gran humareda salía del interior del departamento “G” ubicado en el tercer piso, donde se encontraban dos mujeres y dos pequeños niños descansando.
Una de las damnificadas, Cecilia Da Silva, fue alertada por su hija sobre el fuego que se había iniciado en el lavadero. De inmediato todos abandonaron el edificio, al igual que los vecinos de los otros departamentos, que llamaron a la Unidad 5ª de Bomberos.
Cabe destacar la rapidez de los servidores públicos ya que en contados minutos llegaron al lugar junto con personal policial de la comisaría Seccional Tercera que se encuentra a poco más de una cuadra. Poco más tarde lo hizo personal de la Dirección de Tránsito.
Si bien el fuego se expandió rápidamente por el interior del departamento, los moradores se encontraban en perfecto estado de salud y no presentaban signos de asfixia.
Da Silva aseguró que en el momento de iniciarse las llamas se encontraban durmiendo, desconociendo los motivos que podrían haberlas originado y si bien se presume que el motivo fue un cortocircuito, la mujer alegó que “el diablo metió la cola”.
“Cuando mi hija me despertó, nos preocupamos por sacar a mis nietos que dormían… y después que se quemara lo que se tenga que quemar”, comentó.
Las causas del siniestro aún son materia de investigación, pero está claro que las llamas se iniciaron en el sector del lavadero y que rápidamente se generó una gran humareda que invadió al resto del departamento. Afortunadamente no se registraron víctimas.
- 14 marzo 2012