Uno de los imputados había sido novio de la joven abusada

Uno de los integrantes de la denominada "Manada de Chubut" habría mantenido una relación sentimental con la chica abusada meses antes de que se produjera el hecho en Playa Unión. Así se desprende de una información a la que tuvo acceso el portal El Extremo Sur y que constaría en la investigación previa que realizó la justicia.

El mismo miembro de la manada habría tenido una participación activa la madrugada del 22 de setiembre de 2012 cuando, de acuerdo a la denuncia de la chica, un grupo de jóvenes la abusó luego de hacerla consumir abundante alcohol o hacerle tomar alguna sustancia alucinógena que la dejó inconsciente.

Ese antiguo vínculo que fue lo más parecido a un noviazgo entre adolescentes habría sido lo que posibilitó que varias chicas de Puerto Madryn concurrieran a la mencionada fiesta para recibir la primavera. Es decir que el joven se aprovechó de la confianza que la joven le tenía por la relación que tuvieron para tenderle una trampa.

Como ya informara este medio, la justicia investiga un aberrante hecho ocurrido en una casa de Playa Unión en la madrugada del 22 de setiembre de 2012. Tras la denuncia realizada por una joven, la fiscalía caratuló la causa como “violación gravemente ultrajante cometida por más de dos personas”. La investigación quedó abierta tras la audiencia realizada el pasado viernes en la oficina judicial de Rawson. Cinco fueron los imputados, todos ellos pertenecientes a reconocidas familias de Trelew y Puerto Madryn vinculadas a los ámbitos políticos, empresariales, sociales y deportivos.

Por ejemplo ahí figuran los nietos de un exgobernador y de un exsenador nacional. Ambos del mismo partido político.

PRESIONES Y AMENAZAS

La chica, que en el momento del abuso era menor de edad (tenía 16 años) se atrevió a hacer la denuncia por una red social de un grupo feminista de Madryn llamado “Las Magdalenas”. Luego y a pedido del fiscal Fernando Rivarola la ratificó en sede judicial iniciándose así la investigación.

Tras el hecho, fueron tantas las presiones y amenazas que la menor y sus allegados comenzaron a recibir para que callasen el hecho, que la misma decidió irse de Puerto Madryn junto a su familia y radicarse en la provincia de Buenos Aires. La justicia tiene ahora seis meses para investigar.

En la audiencia del viernes se decidió que los cinco imputados continúen libres con algunas restricciones. La pena prevista para el delito cometido en caso de ser encontrados culpables prevé condenas que van desde los 8 a los 25 años de prisión.

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