Este martes, mientras se realizaba un operativo de control de venta de pirotecnia de parte de la Secretaría de Seguridad a cargo de Antonio Zúñiga, se produjeron incidentes en un puesto de venta de Polonia y Kennedy donde había un grupo de personas vendiendo estos productos sin la habilitación del municipio.
En ese marco, los vendedores no aceptaron la interferencia del personal municipal y comenzó un cruce de palabras que culminó con agresiones físicas hacia el representante de la Secretaría de Seguridad, dejando como saldo una herida en el ojo al mismo Zúñiga.
Por el hecho hubo dos personas detenidas, uno identificado como Sergio Abraham Barros, conocido por tenencia de armas y otros antecedentes, y un menor de 17 años, quienes fueron puestos a disposición de la justicia por los hechos.
En cuanto al procedimiento, Zúñiga indicó que tomaron conocimiento de este puesto de venta porque “nos llegó una denuncia de que habían dos puestos de vendedores ambulantes de pirotecnia sobre Polonia y Kennedy, uno sobre la vereda de la Escuela 72 y el otro en diagonal”.
Es por esa razón que el personal se hizo presente en ese sector y “cuando se estaba haciendo la intervención junto a personal de la Subsecretaría de Seguridad porque no tenía habilitación comercial para vender, apareció un grupo de jóvenes (alrededor de siete personas) a agredir al personal. Yo mismo recibí golpes de patadas y puños”, dijo el funcionario municipal.
Frente al incidente se pidió la presencia policial de la Seccional Tercera que detuvo a los agresores, mientras que también se concretó el secuestro de un gran caudal de pirotecnia que estaba alojado en la Ford Ranger que había huido del lugar, pero que por la acción policial fue ubicada y detenida.
“Tuvimos que pedir la colaboración de la policía para tratar de contrarrestar las agresiones, así que personal de Seccional Tercera se presentó en forma inmediata junto al comisario inspector Gómez, logrando capturar a dos de ellos”, dijo Zúñiga.
“Mi compañero recibió un golpe en unos de los ojos, otro en los dedos, éramos cuatro y tratamos de mantenernos en pie hasta que llegara la policía al lugar. Se trata de personas con antecedentes”, concluyó el subsecretario de Seguridad del municipio.
- 25 diciembre 2013