La fiesta de cumpleaños de Lamine Yamal, la joven estrella del FC Barcelona, ha desatado una fuerte controversia en España y ya tiene repercusiones legales. La denuncia proviene de organizaciones y el gobierno español, quienes critican la contratación de personas con acondroplasia, una forma de enanismo, como parte del entretenimiento del evento. Esta acción es considerada un acto de burla que perpetúa estereotipos dañinos.
La Asociación de Personas con Acondroplasia fue una de las primeras en alzar la voz. En un comunicado, condenaron el hecho como "discriminatorio" y perjudicial para la dignidad de las personas con discapacidad. "Este tipo de espectáculos degrada la imagen del colectivo y fomenta estereotipos ofensivos", afirmó Carolina Puente, presidenta de la entidad. La asociación ya ha anunciado que tomará medidas legales para "salvaguardar la dignidad de las personas con discapacidad".
En paralelo, el Gobierno español también se pronunció sobre el incidente. El titular de la Dirección General de Derechos de las Personas con Discapacidad, Jesús Martín Blanco, anunció que presentará una denuncia formal ante la Fiscalía y el Defensor del Pueblo. "Contratar a personas con discapacidad, con enanismo en concreto, para que los asistentes a una fiesta se rían y se burlen de ellas es denigrante y discriminatorio", sentenció. Martín Blanco subrayó que este tipo de espectáculos ya está prohibido por ley y que, viniendo de una figura pública, "estos comportamientos agravan la discriminación y el estigma que ya sufrimos".
La presidenta de la asociación, Carolina Puente, también exigió una disculpa pública tanto del jugador como del FC Barcelona. La organización argumenta que la influencia de figuras como Yamal "amplifica el daño" al normalizar una conducta que perpetúa la discriminación entre los jóvenes. El club, por su parte, aún no se ha pronunciado sobre el incidente.