Todas las semanas, David, el portero del edificio Santa Fe, sacaba bolsas llenas de excremento de palomas de las terrazas.
Las aves también ensuciaban las ventanas de los departamentos. Por eso, se le encendió la lamparita: colocó decenas de cd's en tanzas y las colgó entre los departamentos. Como las tiras están en constante movimiento por el impacto del aire y generan reflejo, las palomas ni se acercan.
"Las palomas traen la chinche y eso es peligroso. Además ensucian y generan mal olor. Por eso pensé qué podía hacer. Primero puse tiras de bolsitas y logré sacarlas un poco, pero después me acordé de los cd's y esa fue la solución definitiva", comentó David.
Para poner en práctica la idea, el hombre pidió discos en desuso entre los vecinos del consorcio, sus familiares y la gente que conoce en su barrio, según el diario de Cuyo.
"Puse tres tiras y ya conseguí material para armar unas dos más. Los vecinos están conformes porque estábamos todos cansados de las palomas", dijo.