Diego Paincho: “mi papá me iluminó en la última maniobra”

Una carrera vibrante y a la vez emotiva se llevó el comodorense el fin de semana. “Quería ganar sí o sí porque no me hubiese conformado con el segundo lugar”, confesó el actual monarca de los Fiat 128, quien sintió el cariño de mucha gente en parque cerrado luego de la primera victoria de la temporada.

No fue fácil la primera fecha para el piloto Diego Paincho en el inicio de la temporada 2012 de automovilismo. El fallecimiento de Jorge, su papá, hace apenas dos semanas fue una carga emotiva que lo llevó a dejar todo para regalarle un triunfo.
La paridad de los autos en el TP 1.100cc hizo que domine las tandas libres, y se le escapó por poca la pole, pero en la serie ratificó el excelente rendimiento que tenía su máquina para la final donde tuvo un duelo especial con el caletense Jorge Caro.
“habíamos empezado bien el fin de semana, sabiendo que el auto estaba para pelear adelante, para estar entre los cinco primeros pero como soy yo y por mi forma de correr, quería el triunfo”, le comentó ayer a Diario patagónico el campeón del TP 1100cc.
En la serie tuvo un roce con Caro que lo dejó con un poco de bronca pero sabía interiormente que en la final habría revancha, y tenía 14 giros para regalarle una victoria a su viejo.
“Me sirvió la serie para saber donde tenía un poco más de auto yo, y donde tenía menos Caro. La final la viví con mucha intensidad porque sabía que el auto estaba, y que podía llevarme la victoria. Fue muy luchada, con varios sobre pasos, pero a muy poco del final estaba segundo y me tiré a pasarlo. Creo que mi papá me iluminó en la última maniobra y por eso las lágrimas al llegar a parque cerrado”, confesó Paincho.
Mucha gente se alegró por el gran triunfo obtenido, y se acercó a saludarlo, a felicitarlo y a darle un abrazo. “Eso por lo que fue mi viejo. No solo a mí me ayudaba en el auto, sino que hizo mucho por el Auto Moto, y no tenía problemas en ayudar a los demás pilotos si él podía. Por eso la victoria fue para él, para mi familia y para todos los que me apoyaron con una palabra de aliento para que esta fecha pueda estar en pista”, subrayó.
Entre los agradecimientos, Diego reconoce el trabajo de Victorino y Martín Viegas que lo ayudaron para alinear el auto, como así también a Claudio Bórquez y el chapista Carlos Alexis que colaboró para que todo este en orden a la hora de la final.
“Sé que no será fácil este año, pero comenzar ganando me da fuerzas para seguir. No me hubiese ido conforme si salía segundo. Por mi manera de correr, voy al límite. A veces me puedo equivocar pero sin mala intención, y cuando las cosas me va bien me pone muy contento”, sentenció Paincho.
La próxima fecha será en Trelew, los primeros días de abril pero para eso hay tiempo. Hoy es momento de celebrar, pero sobre todo de recordar al padre que al fin y al cabo sigue con él en cada giro que de arriba del auto y en cualquier autódromo de la provincia.

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